Un auto de 1 peso, una casa de 70 centavos y un lote de 117 pesos. Éstos son los insólitos valores que algunos de los principales funcionarios del gobierno de Mendoza presentaron en sus declaraciones juradas ante la Fiscalía de Estado. Claro está, la polémica no se hizo esperar, al igual que las críticas ciudadanas, lo que motivó al gobernador de Cambiemos, el radical Alfredo Cornejo, a admitir el «error» al que quedó expuesto su gabinete y prometer una ley de ética pública con criterios de evaluación más rigurosos, abarcativos y exhaustivos que el decreto que dispuso su antecesor, el kirchnerista Francisco «Paco» Pérez.

El principal dato de la discordia y la controversia lo aportó en su declaración jurada el ministro de Seguridad, Gianni Venier. El funcionario declaró, entre otros bienes, poseer un auto Mercedes Benz SL 300 modelo 91 por 1 peso, que en el mercado hoy supera ampliamente el medio millón de pesos. Es más, el propio Venier ofertó su joya de colección en casi 300.000 pesos en 2014 en un conocido portal de venta de autos, según reveló el diario local El Sol. «Acá no hay ánimo de ocultar nada», se defendió el ministro en las últimas horas.

«Quizá fue un error poner la valuación fiscal y no el valor de mercado», admitió el mandatario provincial en un intento de justificar lo sucedido con las irrisorias presentaciones patrimoniales, que ya habían generado malestar cuando las dieron a conocer los funcionarios de la gestión anterior. Sobre todo por los desfasajes entre lo declarado y los valores reales. De hecho, en su presentación, el propio Cornejo dijo tener un lote por 119.756 pesos, un precio muy distante de su precio comercial.

«Algunos han creído conveniente poner el valor de mercado y otros, el valor fiscal. Quienes han optado por poner la valuación fiscal, entre los que me cuento, lo hemos hecho porque es un dato objetivo y hemos puesto el valor fiscal aun en nuestro propio perjuicio», expresó Cornejo, luego de tener una reunión a puertas cerradas con el fiscal de Estado, el justicialista Fernando Simón, quien por su parte se muestra ajeno a la discusión.

Fuente: Diario La Nación