Por Alejandro Maidana

Conozco tu conducta: no eres ni frío ni caliente ¡Ojalá fueras frío o caliente! Ahora bien, puesto que eres tibio, y no frío ni caliente, voy a vomitarte de mi boca” (Apocalipsis 3:15-16). De esta manera iniciarían una nueva misiva Guillermo Fernández Beret (La Rioja), Roberto Ferrari (San Isidro), Eduardo de la Serna (Quilmes) y Sergio Rafaelli (Santiago del Estero), un Grupo de Curas en opción por los pobres que invita a reflexionar el voto a través de una serie de apreciaciones.

El próximo 19 de noviembre el país se encontrará frente a un balotaje que definirá quién será el próximo presidente que conduzca por espacio de cuatro años, los destinos siempre turbulentos de la Argentina. En ese marco, emergen las figuras de Sergio Massa y Javier Milei, dos figuras diametralmente opuestas que cargan sobre sus espaldas, programas de gobierno completamente disimiles.

Por un lado, uno de los candidatos, el outsider, quién construyó su campaña en base a atacar la casta política exacerbando discursos de odio, y terminó aliado a lo que tanto criticó y denostó. Por el otro, quién ostenta en la actualidad el traje de ministro de economía, y que viene surfeando en un tsunami inflacionario. Sin embargo, y pese a lo álgida coyuntura socioeconómica, la imagen de Sergio Massa sigue siendo la que genera más confianza a la hora de proyectar un plan económico que garantice cierta estabilidad.

El plan motosierra de Javier Milei no cierra desde ningún lado sin una feroz represión, viejas y rancias recetas que pretenden venderse como nuevas e innovadoras atraviesan los oídos de quienes se aferran a una esperanza tan deshilachada como raquítica. Si hay algo que ha quedado en claro en más de una oportunidad, es que la única manera de poder transformar la realidad de las mayorías, es con mayor y mejor democracia, ajustando las herramientas que parten desde el estado y no cercenando las mismas.

Se aproxima un nuevo y definitivo momento electoral, y ante este escenario, un Grupo de Curas en Opción por los pobres volvió a tomar posición y se manifestó a través de un comunicado sin medias tintas. “Nos toca a los argentinos la ocasión de elegir entre dos candidatos. Hay quienes, disconformes con ambos contrincantes, proponen una tercera alternativa que tiene que ver con el voto en blanco, impugnado o definitivamente no ir a votar. Es evidente que, desde una perspectiva legal, tanto votar en blanco como las otras opciones, son electoralmente una opción válida. Un voto nulo parece decir que ninguno de los candidatos nos conforma, pero es importante recordar que, precisamente para eso existe el balotaje, para elegir a quién queremos que nos gobierne, o al menos quién no queremos que lo haga; se trata de que la ciudadanía pueda decir a quién prefiere de los dos, o cual le resulta el menos malo, porque de gobernar el país se trata.

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Es notable ver la cantidad de grupos que invitan, al menos veladamente, al voto en blanco en ambientes del periodismo, del empresariado, de la política y hasta del episcopado. Como así también en construcciones partidarias que no han podido acceder al balotaje. “Resulta que ante la pregunta ¿Estamos de acuerdo con “A”? ¿sí o no? no cabe la abstención, y esto es sumamente evidente. Veamos algunas cosas sencillamente, hagamos el ejercicio de llevar adelante una serie de preguntas que puedan aportarnos cierta claridad a la hora de a elección. Por ejemplo:

– ¿Estamos o no de acuerdo con que el que quiera andar armado que ande armado?

– ¿Estamos o no de acuerdo con que la salud debe ser paga y quien no puede pagarla, pues “lo lamento”?

– ¿Estamos de acuerdo con que la educación debe ser paga y quien no puede pagarla, pues “lo lamento”?

– ¿Estamos de acuerdo con que la política económica argentina la manejen los Estados Unidos, dolarización mediante?

– ¿Estamos de acuerdo con suspender las relaciones con el Vaticano porque el Papa es el representante del Maligno en la tierra?

– ¿Estamos de acuerdo que existe el cambio climático, que debe ser enfrentado – como reitera el Papa Francisco, entre otros – o crees que este es un invento “del comunismo”?

– ¿Estamos de acuerdo con que todo debe ser privado, incluso los mares, y por tanto sólo puede acceder a ello quienes tienen dinero?

– ¿Estamos de acuerdo con que en las políticas internacionales solo debemos tener relaciones diplomáticas y comerciales con quienes piensen como nosotros y si hubiera un cambio estas se han de suspender temporalmente?

– ¿Estamos de acuerdo con eliminar los ministerios de salud, de educación, de trabajo y demás, aunque ocurriera, por ejemplo, una nueva pandemia?

– ¿Estamos de acuerdo con que las obras públicas solo debe financiarlas el capital privado, aunque eso implique que todas las regiones empobrecidas se queden sin rutas, escuelas, hospitales, electricidad y demás “derechos”?

– ¿Estamos de acuerdo con que lo moral o no lo decida el mercado y, por lo tanto, se pueden vender órganos, niños, drogas, armas y cualquier cosa que pueda comprarse?

– ¿Estamos de acuerdo con la violación sistemática de los derechos humanos, la picana eléctrica, la desaparición forzada de personas, la entrega de bebés con la consecuente negación de su identidad, arrojar personas vivas al mar, la tortura, violaciones, secuestros y asesinatos?

¿Estamos de acuerdo con esto o no? Porque el voto en blanco estaría expresando que no interesan (sea quien fuere el que las propone).

Doblegando la apuesta, este Grupo de Curas en opción por los pobres, continuó haciéndose preguntas que buscan ponerle fin letargo en el que moran aquellas conciencias adormecidas y descreídas.

– ¿Estamos de acuerdo sencillamente con la democracia a pesar de todas sus deficiencias o no?

– ¿Estamos de acuerdo con el federalismo, coparticipación incluida o no?

– ¿Estamos de acuerdo con la unión con los países latinoamericanos o no?

– ¿Estamos de acuerdo con que haya un Estado presente para acompañar y proteger a los más vulnerados de la sociedad?

– ¿Estamos de acuerdo con que el estado persiga a los que aumentan los dólares o desabastecen de combustibles para favorecer a sus propios candidatos, aunque la sociedad se vea perjudicada?

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Es evidente, ante estos últimos ejemplos, el acuerdo y consenso debería ser general. Entonces, más allá de tal o cual candidato, ¿parece sensato afirmar que no nos interesa elegir entre uno u otro? “Como curas sabemos dónde queremos y tenemos que estar: junto a los pobres, en favor de sus vidas y sus causas. Y sabemos que, aunque siempre imperfectas, hay opciones que no son opcionales, y hay otras que son definitivamente contrarias a todo lo que creemos. Invitamos a quienes quieran escucharnos a pensar con el corazón, con un corazón sensible a los dolores de las víctimas, a tomar nuestra próxima decisión electoral con una mirada puesta en el futuro y la esperanza”.

Para concluir, quienes vienen compartiendo su vida con los desposeídos, acercaron una última reflexión a solo días de una elección histórica. “A no olvidar que nuestro compromiso cristiano nos impide desentendernos de los pobres; todos sabemos lo que ocurre con un zorro (o un león) suelto en un gallinero. Todos sabemos que el individualismo nos conduce a la ley de la selva, la misma donde un león suelto hace estragos en un rebaño. Estamos convencidos que es un imperativo moral hacer todo lo que esté a nuestro alcance para evitar que Milei sea presidente de la Nación ¡la Patria y los pobres no se lo merecen!

En tiempos donde se impulsan irresponsablemente corridas financieras que buscan dar la última estocada a una economía debilitada, donde los insaciables e inescrupulosos oligopolios formadores de precios atentan contra el pueblo, la generación de conciencia ciudadana por parte de quienes suelen quedar siempre al margen de un recurrente banquete para pocos, puede oficiar de ariete para derribar las puertas de un lúgubre horizonte social.