Después de la fuerte polémica que disparó su designación, finalmente el Gobierno santafesino decidió desplazar al recientemente designado jefe de la Unidad Regional I (URI), Juan Garro, por supuestas afinidades y actitudes nazis.
A pesar de que en un comienzo Garro contó con el apoyo del secretario de Seguridad, Gerardo Chaumont, y otros funcionarios de la administración del gobernador Antonio Bonfatti, ayer el ministro de Gobierno, Rubén Galassi, confirmó su salida de la jefatura y su reemplazo por el anterior jefe de la URI, Sergio Vergara, investigado en una causa por tráfico de drogas.
«La de Garro es una designación transitoria al solo efecto de poder disponer de un funcionamiento adecuado para estos días en que Vergara tuvo que pedir licencia», señaló el funcionario respecto a la designación de Garró, quien en 2006 había sido denunciado por tener un cuadro con símbolos nazis en su despacho y ejercer violencia moral y antisemita contra un subordinado casado con una judía.
Por su parte, Vergara está imputado por el fiscal federal Walter Rodríguez en una causa que investiga el tráfico de estupefacientes en Arroyo Leyes, donde en noviembre pasado apareció un camión semirremolque con más de una tonelada y media de marihuana en un container.
Organizaciones judías y de derechos humanos, el Inadi y la titular de Madres de Plaza de Mayo, Queca Kofman, presionaron para que Garro sea finalmente desplazado de su cargo.
