Enviado especial a Buenos Aires – El Ejecutivo nacional enviará a la Cámara de Diputados este martes un proyecto que tiene por objeto combatir a los barras bravas, y que deberá ser tratado a comienzos de diciembre.

La urgencia para que se convierta en ley se funda en la escandalosa suspensión de la final de la Copa Libertadores de América entre River Plate y Boca Juniors.

La idea es que la iniciativa sea tratada después que el presidente Mauricio Macri oficialice el llamado a sesiones extraordinarias.

Las versiones más fuertes apuntan a un proyecto que fue presentado por el Ejecutivo en agosto de 2016 y que en febrero último perdió estado parlamentario.

Poco tiempo después, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, brindó detalles en una reunión informativa de las comisiones de Justicia y Asuntos Penales; Seguridad Interior y Narcotráfico; y Deporte. No obstante la premura del Ejecutivo, el tema nunca volvió a discutirse.

El proyecto se proponía instaurar un régimen especial en materia de espectáculos vinculados al fútbol, la titular del ministerio de Seguridad, Patricia Bullrich, sostuvo en la presentación que tenía como finalidad «desfinanciar a las barrabravas y desarticular sus negocios ilícitos, los cuales se nutren de este deporte”.

Otro de los puntos que apuntaba a darle efectividad a la norma se centraba en que la admisión a los estadios quedara en manos del Estado y no de los clubes.

En cuanto a las penas quedaba establecido que serían penados con prisión de entre dos y ocho años quienes cometan un delito agrupados bajo la forma de barrabravas o grupos de tres personas o más que cometan delitos vinculados al espectáculo deportivo».

Además, se tipifican nuevos delitos, como la reventa de entradas -sancionada con prisión de un mes a un año- y la venta de entradas falsas -con prisión de dos a ocho años-.

Para “los fundadores, cabecillas, jefes, organizadores o quienes hayan contribuido a la financiación de dichos grupos y para todo aquel que, interviniendo de cualquier otro modo obtuviere provecho o utilidad personal o económica producto de la actividad del grupo”, el mínimo de la pena será de cuatro años de prisión.

También será penado quien permita el ingreso al estadio de personas sin la correspondiente entrada o la debida acreditación. La sanción prevista será de prisión de uno a seis meses; y si se facilita el ingreso de barrabravas, la pena será de seis meses a dos años de prisión.

La connivencia entre dirigentes de clubes y barras está incluida en la letra del proyecto y prevé la inhabilitación a funcionarios por el doble de tiempo de la condena penal para ejercer cargos públicos.

Video: Gentileza de Señal U