Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires – El diputado nacional del Frente de Todos, y ex embajador ante la Santa Sede, Eduardo Valdés, dijo a Conclusión que le «gusto mucho» que el Presidente Alberto Fernández, haya impulsado la reforma judicial y como la planteó y que se deberá rendir cuantas sobre la intervención a la Agencia Federal de Inteligencia y la transparencia de sus fondos», pero también subrayó que «el proyecto de aborto no empañará la relación del gobierno con el Papa».

Para el legislador, el primer mandatario dijo algo «muy importante» como que «salgan» a la luz «las declaraciones ocultas clasificadas de la AFI, para saber que pasó con la AMIA y el porque los argentinos no saben todavía lo que paso en ese momento».

Consultado por Conclusión, acerca de como impactará la relación del gobierno con la Iglesia, tras el anuncio de Alberto Fernández de enviar un proyecto de ley que legaliza el aborto al Congreso, dijo que «quería rescatar, que es la primera vez que se ve a un presidente que toma al Papa Francisco en una de sus oraciones más profundas, como una modalidad de gobierno y la forma de ver la Argentina, al hacer mención del Santo Padre, cuando dijo que se debe construir una sociedad sin descartar a nadie».

Valdés expresó que al escuchar al titular del Ejecutivo señalar esta idea, le generó una «gran emoción», y que «es la primera vez que se da una apertura de la Asamblea Legislativa en la que se hace mención sobre los valores y los principios del Papa». 

En relación al proyecto que prometió Alberto Fernández sobre la interrupción voluntaria del embarazo, expresó que el no la «votaría» y explicó que es de las «personas que intentó deconstruise» pero no pudo, porque «cuando hay embrión me cuesta creer que no hay vida», pero «no soy quien para pedirle a los demás que piense lo que pienso, lo cierto es que muchos dicen que el siglo XXI es el de la mujer». 

«Sería muy necio decir que no veo las grandes movilizaciones de las mujeres, el presidente siempre dijo lo que pensaba, es un gran jurista del derecho penal, y desde ese lugar el siempre planteó cosas distintas de la que concibo, pero eso no impedirá que las relaciones con la Iglesia puedan seguir siendo buenas», manifestó el amigo de Francisco.

Para dar una idea de lo que vino aconteciendo en distintos países de Europa, con la legislación que se aprobó sobre el aborto, contó que en «Italia se votó en el año 1995, con Juan Pablo 2 de Papa, no se excomulgó a nadie y en el año 1975, Valery Giscard D´estaing, el presidente más católico que haya tenido Francia, tenía una ministra de salud sobreviviente del holocausto, se voto la interrupción del embarazo». 

Y añadió: «El Papa Pablo VI, lo llamó dándole orden como jefe de los católicos y el dijo que como presidente de Francia no podía mas que hacerlo que le pedía su ministra de Salud».

En relación a los otros anuncios dijo sentirse «orgulloso de tener el presidente que tenemos».