Darío Fernández es afiliado al radicalismo desde hace más de 30 años, y al ver que la UCR participaría en la ciudad con lista propia por fuera del Frente Progresista, decidió lanzarse a competir por una banca en el Concejo.

“Vimos que la UCR recuperaba su propia identidad y nos pareció que era el momento que haya una expresión genuina con actores sociales extrapartidarios con mucha vocación de servicio”, afirmó el dirigente radical en una entrevista con Conclusión.

Fernández, tendrá la difícil tarea de competir en la interna partidaria local con el edil Martín Rosúa. Consultado sobre las dificultades de disputar el proceso electoral contra grandes estructuras de poder indicó que “mucha plata invertida en una campaña habla mal de ese candidato. Lo nuestro es mucho lomo y coraje”.

En relación a su visión del desempeño del actual Concejo de Rosario, analizó que “el Concejo se abstrajo en su puja de poder y se alejó de la gente”. Y agregó: “No hay vecinos que se sientan representados por un concejal”.

“Queremos que los 28 concejales de la ciudad tengan puestos fijos en distintos barrios con la obligación de una vez por semana visitar esa oficina y atender las necesidades de la gente”, propuso Fernández.