Por Facundo Díaz D’Alessandro

La debacle económica argentina de los últimos años profundizó una realidad palpable desde hace otros tantos, arraigada en la característica pendular y/o ciclotímica de las finanzas domésticas.

Es la onda expulsiva en lo que hace a inversiones (paradójicamente, algo a lo que tanto se apuntó, al menos desde lo discursivo o la generación de condiciones para beneplácito de ciertos sectores empresarios), logrando no sólo que potenciales interesados regionales “la pongan” en el país sino también evidenciando una salida de capitales locales hacia países limítrofes.

Ese foco, en especial, se posa en dos países vecinos de Argentina: Uruguay y Paraguay.

El primero, con una estabilidad sostenida en el tiempo y variables macro “razonables”, posiblemente derivadas de la templanza política, aún sin crecer considerablemente.

El otro, a partir de un crecimiento sostenido a lo largo de los últimos años, con un despegue que ya empieza a ser vuelo alto y con un amplio margen para seguir creciendo, por factores sociales, políticos y en especial demógraficos, que llevan a muchos a señalar que Asunción se va consolidando como “el corazón de Sudamérica”, al menos en términos financieros.

Alertados de esto, desde la empresa InfoCasas, especializada en Real Estate (bienes raíces), con origen uruguayo pero presencia regional en Paraguay, Bolivia, Perú y algunas oficinas digitales en España, México o Colombia, trajeron a Rosario distintas propuestas de desarrollo, representantes empresariales y posibilidades de negocios, expresadas en el evento Argentina Invierte, realizado días atrás.

En diálogo con Conclusión, Alejandro López, Ceo de la firma uruguaya organizadora, instalado desde hace un lustro en tierra paraguaya contó que la decisión de organizar el evento surgió a partir de ver “resultados de búsqueda de argentinos, a nivel de propiedades, que en esos países aumentó.”

Luego de un evento que “superó las expectativas y fue sensación” en la primavera porteña de 2019, optaron por trasladar también la propuesta a Rosario y Córdoba, los pasados 13 y 15 de febrero, respectivamente.

“Nos encontramos con una Rosario abierta a ver el mundo inmobiliario que hay en Paraguay y en Uruguay, un público que se nota que es inversor, que está entusiasmado con la idea de poder explorar otros mercados”, precisó López.

Sobre las bondades que pondera de esos mercados “limítrofes” al argentino, dijo: “Para el argentino, Uruguay siempre fue un mercado estable, en el cual se sienten cómodos, que nos tiene como hermanos. Paraguay en estos últimos años ha crecido, sobre todo con muchos desarrollos inmobiliarios, ha abierto sus puertas a esa inversión. Lo que tiene que ver con su crecimiento, en los últimos años el PBI crece a un ritmo de 4%, es un país fuerte en el mercado, pero todavía sin tanta exposición. En estos últimos 5 años me tocó vivir ahí y puedo hablar con propiedad de cómo ha crecido, con un 10 % de IVA, 10% de carga impositiva. La rentabilidad a nivel de lo que tiene que ver con inversores, comprar un apartamento, ponerlo a rentar, se mantiene entre 6 y 8 %, mientras en Uruguay está entre 3 y 4%, si tenés buena inversión podes llegar al 5 o 6% anual”.

En esa línea, el empresario resaltó el margen que aún tiene para seguir creciendo la ‘city paraguaya’.

“Asunción hoy en día sigue siendo una de las ciudades que tiene mayor nivel de crecimiento, por cantidad de gente, porque todavía no hay grandes proyectos inmobiliarios, y porque la clase media es la más desatendida. Hay una falta de alrededor de 100.000 viviendas, para construir a razón de 5000 por año, sigue sin dar la cuenta. Esto hace que sea atractivo para un inversor, en especial ir a construir, desarrollar: mano de obra de buena calidad, controlable, en un año tenés una obra construida”, detalló.

Razones para ser la “nueva meca”

Una de las razones menos observadas respecto a los beneficios de los que goza Paraguay, respecto a su capacidad de crecimiento económico, es de índole demográfica: la edad promedio del país guaraní oscila los 20 y 25 años.

Con este umbral bajo etario, lo cual se replica en una población que es en su gran mayoría “económicamente activa”, otorga una fuerza motora comparativamente superior respecto a otros países sudamericanos, a la vez que un desafío en tanto y en cuanto se debe atender esa demanda y generar la oferta, para “propios y ajenos”.

“Lo que se está dando en Paraguay es una demanda creciente, no solamente por propios sino por los ajenos. Es una de las poblaciones más jóvenes de Sudamérica, y esa gente va a empujar el día de mañana para tener su propia vivienda. Independientemente de eso, estamos viendo mucha migración desde Brasil y Argentina, por el contexto que están viviendo, en lo político y económico; no es que podríamos decir que se van a invertir solamente, sino hasta se van a vivir, a buscar oportunidades de trabajo, eso hace que desde afuera vayan a mudarse a Asunción”, explicó a Conclusión Francisco Soldani, desarrollador de Petra Urbana, de Paraguay.

La capital paraguaya tiene alrededor de 3 millones de habitantes, con lo cual concentra casi el 50% de consumo masivo del país (que tiene aproximadamente 7.800.000 pobladores).

“Particularmente, desde hace dos años a esta parte el inversor argentino, sobre todo de las grandes metrópolis, están buscando otros horizontes de inversión como Paraguay, que desde hace más de 10 viene haciendo la tarea bien y es macroeconómicamente estable. Pero la lupa del inversor se pone allí, independientemente de lo que es el país, por la rentabilidad que va a tener, que es de las más altas de la región”, precisó el desarrollador paraguayo.

El precio de adquisición del metro cuadrado en Asunción es muy inferior a otros de la región, incluso llegando a la mitad de lo que se puede conseguir hoy por hoy en Rosario. Eso, a su vez, hace que naturalmente la rentabilidad pueda escalar muchísimo más allí que en casi la totalidad de las capitales de la región.

Además de estas “bondades”, según la visión de Soldani, “lo que está haciendo muy bien Paraguay, que atrae inversiones de todo tipo”, es lo que tiene que ver con el “Régimen de Maquila”.

“Lo que hace es exonerarte un 100% de impuestos por 5 años y eso se puede prolongar hasta que te establezcas. Permite a las empresas extranjeras que puedan venir y darle un proceso o un re-proceso a materia prima que traen de otro lugar, para transformarlo usando mano de obra local. El boom de Paraguay se está dando no sólo en el mercado inmobiliario, sino también en consumo masivo y demás, y se está convirtiendo en centro logístico para todo lo que es Brasil, Argentina, Bolivia y Chile”, concluyó.

¿Uruguay puede cambiar?

En vistas de la transición por la que atraviesa Uruguay, en la proximidad del traspaso de mando del Frente Amplio a la coalición triunfante (de tinte más “conservadora”), con Luis Lacalle Pou como presidente electo, no son pocos los que se preguntan si puede llegar a alterarse en algo esa “templanza” uruguaya, también en el plano macroeconómico, ya sea para bien o para mal.

Consultado por Conclusión, el empresario Nicolas Gammela, de BeOne, afirmó que, en su visión, “no se va a cambiar mucho” ya que “viene con una estabilidad de hace años” y eso “va a seguir así”.

“Puede haber alguna norma puntual, están hablando de levantar alguna restricción en la parte financiera, eso puede ayudar inclusive al argentino sobre todo. La política económica en general va a ser la misma, no hay cambio abrupto como en Argentina, es todo sostenido y tranquilo”, puntualizó.

Por su parte, López, de InfoCasas, manifestó respecto a su país de origen que, si bien Uruguay es “un país caro”, se esperanza con que se pueda lograr “un saltito de un par de puntos del PBI, que hace falta, para tener mejores ingresos a nivel laboral, fundamental para que el crecimiento del país siga”.

Igualmente, sostuvo: “Más allá de un cambio de gobierno, Uruguay siempre fue estable, lo mismo ahora, el nuevo gobierno prácticamente está incluyendo ministros de lo que fue el anterior, pareciera perfilarse como un gobierno más de coalición y no tanto de Partido Blanco y Partido Colorado, que son los tradicionales, sino también con el partido saliente, que es socialista, incluyéndolo. Hay una política de seguir por el mismo camino”.