Un pedido para que se declare la emergencia económica para la producción lechera fue realizado hoy en el marco de una reunión de los integrantes de la Mesa Nacional de Productores de Leche (MNPL) en el Senado.

El pedido fue formulado por el coordinador de la MNPL, Carlos Brave, luego de lo cual el ex gobernador de la provincia de Santa Fe, José María Vernet aseguró después que se declare la emergencia económica se debe «construir» un «modelo integrador exportador que defina el rol de la industria y de los supermercados».

Passerini, tambera mediana de Carlos Casares, en la Cuenca láctea Oeste de la provincia de Buenos Aires dijo ante el panorama de «crisis terminal presentado» que la Argentina debe ser muy «buena» porque a pesar del estado de cosas es el «sexto exportador mundial» de leche en polvo.

Por parte del Senado, la convocatoria estuvo a cargo del Interbloque Parlamentario Federal y fue motorizada por el senador Adolfo Rodríguez Saa quien abrió el debate acompañado por Liliana Negre de Alonso (ambos de Alianza Compromiso Federal San Luis).

También se encontraban el senador por Entre Ríos y ex director de Federación Agraria, Alfredo de Angeli y Roberto Basualdo (Alianza Compromiso Federal, San Juan) quien señaló que hay 65 proyectos legislativos que sobre las economías regionales entre ellos la láctea para ser tratados y señaló que «no hay voluntad
política para tratarlos».

Uno de los datos brindados por de Freijoo es que desde 2002 a la fecha se cerró un tambo por día y que en total, dejaron de funciona 4903 establecimientos.

Dada la profundización de la crisis, los productores solicitaron a los senadores entre  otras herramientas, exenciones impositivas y medidas financieras efectivas y aseguraron que los Roel (permisos de embarque para exportar) son un instrumento de uso extorsivo.

En el panorama trazado se muestra con claridad como desde que en 2005 comenzó la intervención al sector lechero y antes se subieron las retenciones del 5 al 15 por ciento el sector entró en falta de competitividad y hoy enfrenta la inflación y la elevada presión impositiva.

Uno de los temas que toca a todas la cadena láctea es la caída internacional de los precios ya que en lo que va del año, el valor de la leche en polvo en el mercado mundial tuvo una reducción del 65%, lo que fue algo «violento» para Passerini.

Las proyecciones indican que el mercado no se normalizaría hasta mediados del año que viene y al mismo tiempo en el mercado interno, el precio de la leche al consumidor aumentó un 611%, desde 2006.

En algunos productos lácteos el aumento fue mayor aún y por ejemplo, es de 789% en el caso del queso tipo cuartirolo. En ese mismo período el incremento del precio que recibió el tambero fue mucho menor: 420%.
Ahora las usinas lácteas que atraviesan sus propios problemas en la industria amenazan con no recibir la leche a los productores que a su vez están descapitalizados.

Participaron también en el salón Eva Perón del primer piso del Senado representantes de asociaciones, cámaras de Productores de Leche, entidades gremiales agropecuarias y centros tamberos de Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Buenos Aires que integran la MNPL.