La Canasta Básica Total, que define el nivel de pobreza, aumentó 1% en febrero respecto de enero y alcanzó un costo de $40.789,67 para una familia tipo, informó hoy el INDEC.

La Canasta Alimentaria, que marca el nivel de indigencia, registró un incremento 1,9% en la misma comparación, con un costo de $16.785,87.

Según las cifras oficiales, la canasta Total creció en el primer bimestre del año 4,7% y la Alimentaria 7,7%, por encima de la variación del costo de vida desde diciembre último.

Ambas canastas aumentaron en febrero algo menos que el Indice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC, que en ese mes registró un alza del 2%.

En cambio, el encarecimiento del costo de las dos canastas, en el primer bimestre del año, se ubica por encima del alza del costo de vida del 4,3%.

En los últimos 12 meses, la Canasta Básica Total aumentó 47,9% y la Canasta Alimentaria 51%, mientras que para el INDEC los precios crecieron en ese periodo un 50,3%.

Una familia integrada por un matrimonio, que no paga alquiler y tiene dos hijos de seis y ocho años en el Gran Buenos Aires, tuvo que contar en septiembre con ingresos por $40.785 para no ser considerada en la pobreza y de $16.785 para no ser calificada como indigente.

Para una familia tipo de tres miembros, el costo de la Canasta Total fue en febrero pasado de $32.473 y la Alimentaria de $13.363.

En un hogar compuesto por cinco integrantes el costo de la Canasta Básica Total en el mismo mes fue de $42.901 y la Alimentaria de $17.655.

Para un solo adulto, el INDEC estimó el costo de la Canasta Básica Total en $13.200,54, para no ser considerado pobre.

La Canasta Alimentaria está compuesta por el total de artículos que reúnen los requerimientos calóricos y proteicos necesarios para un varón adulto, mientras la Canasta Básica Total incluye estos alimentos más el costo de servicios públicos y otros gastos.