El embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli, valoró este viernes el apoyo que brindó el presidente de ese país, Jair Bolsonaro, a las negociaciones de la Argentina con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda externa, y dijo que era la consecuencia de «haber generado ámbitos de diálogo, de recuperación de la confianza», lo cual permite funcionar «con una agenda positiva, constructiva, para ambos países».

Este respaldo de Bolsonaro «me parece que muestra a las claras, por distintas acciones que se vienen llevando adelante y por los resultados, de qué manera se viene reconstruyendo la relación con Brasil, impactando positivamente en nuestro país», sostuvo Scioli en declaraciones a la radio de la agencia estatal Télam.

Bolsonaro anunció que el 26 de marzo realizará su primera visita oficial a la Argentina, en el marco de las celebraciones por los 30 años de la fundación del Mercosur, y con una frase de tono futbolero, manifestó que «hinchamos para que Argentina tenga éxito en las negociaciones con el FMI» y que «Brasil es uno de los grandes interesados en eso».

Scioli puntualizó que Bolsonaro «hizo público su respaldo a las negociaciones de la Argentina con el Fondo, en ocasión de recibir la invitación que le cursó la Cancillería, que yo le hice llegar personalmente» para asistir a la reunión del Mercosur.

El embajador comentó que, en el último encuentro que tuvo con el presidente brasileño, él le hizo referencia «con fundamentos» a la expectativa que tiene la Argentina de que Brasil «respalde las negociaciones con el FMI», porque, argumentó Scioli, «la estabilidad de Argentina es una buena noticia para Brasil, como también la recuperación de Brasil es una buena noticia para Argentina».

«Ya hemos visto cómo se complementan y cómo se potencian nuestras economías, y juntos nos vamos a recuperar más rápido de las consecuencias que está teniendo la pandemia», afirmó el diplomático y exgobernador bonaerense.

Scioli recordó que, en ocasión de asumir sus funciones en la representación en Brasilia, el presidente Alberto Fernández le dio «una instrucción clara y un mandato de trabajar pensando lo mejor para la Argentina junto al gobierno de Brasil, junto a cada una de las áreas de su gobierno, y de los estados brasileños».

«Fuimos desarrollando un arduo trabajo, conversando con cada ministro, con el propio Bolsonaro, con toda su área económica, para explicar la situación de Argentina, los objetivos, y cambiando una percepción que ellos tenían», relató al detallar su gestión en el vecino país.

«Hemos generado ámbitos de diálogo, de recuperación de la confianza, que se comprenda en profundidad de qué manera se están abordando los problemas estructurales que se dieron a partir del gobierno anterior, como el caso de la deuda», agregó Scioli.

De acuerdo al diplomático, esas gestiones le permitieron «en lugar de escalar las situaciones de conflicto», por el contrario, «descomprimir y encauzar».

«Hoy estamos viendo de qué manera estamos funcionando con una agenda positiva, constructiva, para ambos países», resaltó y agregó: «Le hemos dado a la embajada (de Argentina en Brasil) «una fuerte impronta comercial, ejecutiva y política».

«Después de haber reconstruido el diálogo político institucional me estoy abocando de lleno a la agenda comercial, y a destrabar distintas situaciones y dar previsibilidad, certidumbre, como el caso del trigo, de la pesca y de otros sectores con los que estamos trabajando», precisó Scioli al detallar sus gestiones.

«Pusimos en marcha un programa de promoción de exportaciones, en línea también con lo que es una necesidad, para generar dólares genuinos y puestos de trabajo y oportunidades para nuestras provincias, que se ven reflejados en que, por segundo mes consecutivo, tenemos superávit comercial con Brasil y un crecimiento constante», informó.

También mencionó otras áreas, como la energética, «donde después de seis años se volvió a exportar gas»; el desarrollo de proyectos de infraestructura, y la relación directa de la oferta exportable de algunas provincias argentinas, entre ellas La Pampa y La Rioja, al mercado brasileño.

«Un trabajo que hemos hecho con la Cancillería con cada una de las regiones brasileñas se vio reflejado en haber destrabado un viejo reclamo al sector de la pesca, los langostinos, que estaba judicializado, por un potencial exportador de más de 120 millones de dólares de acuerdo por año, según los datos que expresan los propios exportadores de las provincias de Buenos Aires, Santa Cruz y Chubut», resaltó el embajador.

Y, luego contó desde su llegada a Brasilia ya visitó nueve estados en los que se reunió con los respectivos gobernadores y con los empresarios del lugar con interés en invertir en ambos países para promover, por ejemplo, inversiones de la empresa Marcopolo para ampliar su planta en Santa Fe; de la fábrica de calzado deportivo Dash en Misiones y Buenos Aires, y de la empresa Randon, que produce remolques.