El Banco Central volvió a desprenderse de divisas y las reservas internacionales perforaron el piso de los 27.000 millones de dólares, al posicionarse en unos 26.958 millones.

Con un descenso de 72 millones respecto de la jornada anterior, el patrimonio de la autoridad monetaria retrocedió a un nivel que no se registraba desde el 3 de abril de 2014.

De acuerdo con la información difundida por la autoridad monetaria, se realizaron pagos del sector energético por U$S 31 millones, del sector automotriz por U$S 25 millones y un pago por operaciones cursadas a través del sistema SML por U$S 5 millones.

Además, la entidad intervino en el mercado cambiario con una venta de 40 millones de dólares ante la acotada oferta por parte del segmento privado.

En lo que va del mes, el organismo acumuló colocaciones por 1.580 millones para hacer frente a la demanda de divisas.

En línea con esas mediaciones, en septiembre había inyectado unos 1.730 millones de dólares para frenar la escalada del dólar en el circuito financiero informal y controlar los precios en el mercado de dólar futuro.

Sin embargo, las reservas no sólo sufrieron sacudones por las estrategias interventoras, sino también por el vencimiento de bonos.

El más importante fue el del Boden 2015, saldado en la primera semana del mes, el cual significó desprenderse de parte de los dólares que acuñaba para pagar los 5.900 millones, en uno de los mayores esfuerzos financieros de los últimos años.

A su vez, en el transcurso de octubre se vendieron más de 677,5 millones de dólares para atesoramiento de modo limitado, a través del mecanismo regulado por la Afip.

El denominado dólar ahorro, cuyo valor equivale al del oficial con un recargo del 20 por ciento, cotizó en bancos públicos a $11,46.