El economista Martín Redrado se declaró optimista por el futuro de la economía nacional y estimó que «el crecimiento del país podría retomarse a principios del 2017».

Además, el economista del Frente Renovador afirmó que “el 10 de diciembre comenzó un vuelo hacia la normalidad, y esta vez el avión no se va a caer”.

En el marco de un ciclo de charlas organizadas por la firma Sancor Salud de Rafaela, y que tuvo como sede el salón colonial del Jockey Club, Redrado afirmó que el presidente Mauricio Macri y su gabinete económico «nos van dando políticas económicas por grageas».

«Macri, al ser ingeniero civil, no es de derecha ni de izquierda, sino que se trata de una persona práctica. Tiene una visión mucho menos ideológica de las políticas públicas, es más práctico. Mientras que el gobierno anterior miraba a la economía desde la ideología, donde el sector privado tenía muchas veces intereses contrapuestos al del sector público», puntualizó.

«Para que una economía funcione debe tener tres motores: el consumo, la inversión, el sector externo. Si el consumo anda fenómeno, o por lo menos tira, si la gente está invirtiendo para tomar nuevos trabajadores, para comprar nuevas maquinarias; si está buscando nuevos mercados, ahí yo tengo una economía sustentable”, explicó.

“Este gobierno lo que dice es que el consumo deje de ser el motor de la economía y sea la inversión. Ahora hoy estamos en el medio del río, porque ni hay consumo, dado que hubo un golpe importante al bolsillo de los argentinos, ni tampoco todavía hay inversión. Me gustaría que esto fuera completado con un programa económico integral que nos esté marcando el camino”, manifestó Redrado.

“Tenemos un Banco Central que está tratando de dominar a la inflación, cree que con la tasa de interés lo va a lograr y eso es como querer parar un auto que viene a 200 km por hora y agarrarlo de la antena. La inflación se baja marcando un sendero de las principales políticas públicas hacia adelante», aseguró.

«Si uno quiere que la inflación sea del 25 por ciento, hay que hacer que el gasto público sea del 25 por ciento, que la recaudación impositiva crezca un 25 por ciento, que la emisión monetaria sea de un 25 por ciento más que el año pasado», como también «una política de precios y salarios que también acuerde en un 25 por ciento, y que la inversión en políticas públicas también genere un aumento del 25 por ciento”.