En miras de combatir el acelerado aumento de precios, que en el primer bimestre acumuló una suba del 8,8%, el Gobierno se encamina a congelar el precio de alimentos y a brindar un crédito a tasa subsidiada para la compra de trigo, con el objetivo de que los molineros puedan adquirir este grano al mismo valor de febrero.

Así lo anunció este lunes, en conferencia de prensa, el ministro de Desarrollo Productivo Matías Kulfas, quien detalló que, para contener el precio de la harina de trigo y sus derivados, se lanzará una “línea de créditos por $8.000 millones a tasa subsidiada para la industria molinera”.

El objetivo de esta medida es que los molinos aceleren la compra de trigo para producir harina pero eviten “un traslado masivo de precios a la mesa de los argentinos”.

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Asimismo, agregó que “no hacer nada es convalidar que subas en los valores del trigo se trasladen al precio de los productos claves en la mesa de los argentinos”.

Seguidamente, el ministro afirmó que el fideicomiso para subsidiar el precio de la harina de trigo -luego de la suba internacional que tuvo tras el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania- permitirá que harineros dispongan del producto a precios de febrero, con lo que se retrotraerían los precios del pan, harina y fideos. 

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El fideicomiso estará fondeado con la suba de dos puntos porcentuales de retenciones que se aplican sobre las exportaciones de harina y aceite de soja que anunció el sábado último el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Julián Domínguez.

“Se va a compensar a los molinos harineros” para que el costo del grano sea el mismo que en febrero, dijo Kulfas, a la vez que afirmó que “los productores de trigo no van a tener ningún perjuicio”.

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Por otro lado, Kulfas anunció que “en 24 horas” se definirá cuáles son los alimentos cuyos precios se retrotraerán a los valores que tenían del 8 al 10 de marzo, tras la reunión que mantuvo junto a dirigentes de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal) y de supermercados que, según el ministro, fue “constructiva” aunque “tuvo algunos momentos de tensión porque había una suerte de negación” por parte de los empresarios.

“En 24 horas se va a clarificar cuál es la responsabilidad de la industria y de los intermediarios y los precios que se hayan adoptado de manera injustificada tienen que ser retrotraídos hacia 8 o 10 de marzo, que tienen que ver con los esquemas de Precios Cuidados que implementa la Secretaria de Comercio Interior”, afirmó el funcionario.

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“Hubo subas mucho más importantes que no estamos dispuestos a convalidar, por eso también les dijimos (a los empresarios) que todos los precios aumentados después de esa fecha se retrotraigan y, si hubiera laguna diferencia, que sea explicada debidamente y por eso en estas 24 horas de impasse queremos seguir dialogando”, agregó.

Por último, dijo que el Gobierno “apuesta a que estos diálogos terminen de manera fructífera” pero que “si llegara a haber algún faltante no se dudará en aplicar la Ley de Abastecimiento, como se hizo en otras ocasiones”.

“No está descartada la creación de una empresa nacional de alimentos”, dijo el funcionario, mientras reconoció que uno de los segmentos en donde se está produciendo una escalada en los precios es en alimentos frescos, por lo que adelantó que se está pensando en un fondo de estabilización con el Mercado Central, aunque “aún está en estudio”.

Por último adelantó que el miércoles el secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, avanzará con anuncios para los comercios de cercanía.

El pasado viernes, el presidente Alberto Fernández había anunciado la creación de un “fondo de estabilización”, oportunidad en la que adelantó que los ministros iban a ser los “encargados” de mantener a la población diariamente informada sobre las medidas que se implementen para contener la suba de precios.