Enviado especial a Buenos Aires .– Este miércoles, distintas organizaciones representativas de la agricultura familiar y campesina, junto a la Federación Agraria Argentina (FAA) realizaron un «Semillazo» de protesta en contra de lo que consideran “la Ley Monsanto-Bayer» de semillas y por “una reforma agraria integral y popular”.

La concentración se realizó en la plaza frente al Congreso Nacional desde las 11.30, con charlas y debates que sirvieron de previa a la audiencia pública realizada a las 14 en la Cámara de Diputados de la Nación.

Omar Príncipe, presidente de la Federación Agraria Argentina (FAA), aseguró en diálogo con Conclusión que están “muy conformes” de la jornada, y que allí se pudo ver “la unidad de más de 20 organizaciones de agricultura familiar”.

“Somos los productores agropecuarios que producimos los alimentos que a diario consumen los argentinos y estamos resistiendo a un embate de que estos alimentos, la semilla de estos alimentos, esté en manos de un monopolio como Monsanto”, aseguró Príncipe a este medio.

En su reclamo, lo que buscan es que el Estado no garantice “la posición dominante de Monsanto sobre los alimentos y las semillas en Argentina” y en donde también se encuentran en discusión ejes como la salud y los negocios.

“La salud también viene de la mano porque las patentes de las semillas tienen un paralelo con las patentes de los medicamentos. Hay patentes, tanto en semillas como en remedios, que caen todos en un sólo monopolio que es Bayer-Monsanto”, indicó el titular de la FAA a Conclusión.

Para ellos, el primer paso es “resistir a este borrador de proyecto que presenta el ejecutivo” y luego “adquirir una ley de semillas que sea con derecho propio para los productores”.

En esta misma línea, el Dr. Aldo Casella, especialista en Derecho Agrario, explicó que el reclamo “apunta fundamentalmente a que no se genere un sistema totalmente hegemónico en torno a líneas de producción a partir de la monopolización del material de reproducción”.

“Si bien es una de las consecuencias de un sistema muy sistematizado y muy monopolizado por ciertas empresas. Sin dudas afecta a la variabilidad”, aseguró a Conclusión, y luego agregó: “reclamamos el acceso a la tecnología y la libre disposición de las semillas, del material de reproducción. La acción antimonopólica que implica que el productor puede usar libremente su semilla y vender libremente su producto”.

El pasado 1 de septiembre, la comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados de la Nación inició el tratamiento de un nuevo régimen de promoción de la producción y comercialización de semillas y creaciones fitogenéticas, adempas avanza en la idea de derogar la Ley 20.247.

Allí, el titular de la Comisión, Atilio Benedetti (UCR) de Entre Ríos, explicitó que existen cinco proyectos que serán abordados para su estudio. Las iniciativas tienen por objeto que “Argentina incremente su potencial productivo, adecuándose a los tiempos presentes”, y convocó a “consensuar una ley y encontrar acuerdos”.

Unos 21 diputados nacionales participaron del primer debate, sin que todavía haya una iniciativa oficial.

En un comunicado, la Federación Agraria Argentina expresó: “el Ministerio de Agroindustria pretende hacernos creer qué hay un acuerdo de mayoría que, casualmente, refleja al pie de la letra las imposiciones de Monsanto en 2004, pretensiones que al no poder plasmar parlamentariamente, en 2005 intentó imponerlas reteniendo barcos con carga argentina en puertos europeos”.