El presidente Mauricio Macri evalúa que el país vuelva a implementar retenciones al campo y lo elevaría a un 33% hasta 2020. La decisión se encuentra dentro del artículo 83 del presupuesto 2019 y tras darse a conocer, las respuestas por parte sector agropecuario no tardaron en llegar.

El artículo dispone la facultad al Poder Ejecutivo de elevar hasta un 33% la aplicación del impuesto a las exportaciones de todos los granos hasta final de 2020 de ser necesario. De esta manera, se proyectaría un vuelco de los productores hacia la soja, que entrega mayores ganancias, contra el trigo y el maíz, entre otros granos.

La noticia no cayó bien dentro del sector agropecuario que consideraron «un golpe a la producción». «El valor de la soja esta muy bajo y si le ponen esta retenciones será imposible producirla en Argentina», expresó el Presidente de la Sociedad Rural, Tomás Layús, en diálogo con Conclusión.

«Uno de cada tres camiones se los lleva el Estado. Es el Estado el que tiene que bajar los gastos. No puede ser que transfiera todo ese peso de la economía a la economía real, el productor. El ajuste lo tiene que hacer la política. Quienes no tributan, los jueces, la actividad financiera y al que produce tienen que bajarle los impuestos», manifestó Layús.

Por otro lado, el productor aseguró que la soja es la más baja en diez años. De valer 600 pesos durante el gobierno anterior, hoy vale 320 pesos.

En tal sentido, Layús se refirió al aumento del precio del gasoil que si bien en términos de dólares esta más barato que antes, «en la relación insumo- producto es la que nos afecta» y remarcó el costo de las tasas de interés que rondan el 70%. «No hay forma de compensar eso», resaltó.

Con la seguía mas grande de los últimos 70 años, una primavera que se presenta particularmente seca y las heladas tardías, dejan ver un panorama poco alentador para los productores agropecuarios. «Los cultivos de trigo y legumbres, están atravesando el período crítico en malas condiciones, por lo tanto, esto repercutirá negativamente en los rendimientos. También hay preocupación en el atraso de la siembra de maíz, así como la producción de forrajes», señaló Layús.

«Las medidas adoptadas por el gobierno nacional al que acompañaron los gobiernos provinciales y municipales se basan en buscar la salida más fácil, la cual es arrebatar ingresos productores, en su mayoría pymes, que aportamos nuestro esfuerzo desde siempre, invirtiendo en el país y padeciendo la falta de infraestructura vial, portuaria y sometidos a un control sistemático y permanente de todo tipo de ente burocrático», concluyó.