El ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, declaró durante el fin de semana que el candidato a presidente del PRO, Mauricio Macri, “no dice toda la verdad” en cuanto a las políticas económicas que implementará, “porque o está diciendo una barbaridad técnica o está ocultando que en realidad el primer día piensa hacer una gran devaluación” y generar “un gran endeudamiento externo porque es la única manera de producir desde el primer día una suficiente cantidad de divisas como para abrir el cepo”.

En declaraciones a la radio MDZ Online, Lavagna también dejó entrever una postura más cercana a los planteos que viene haciendo el economista de Daniel Scioli, Miguel Bein, cuando afirmó que lo que plantea el candidato del PRO es una “Macri devaluación”.

“Hoy los argentinos tenemos que elegir entre tres alternativas”, expuso el ex ministro de Néstor Kirchner, que son “la continuidad sobre la que en reiteradas ocasiones he manifestado que la situación es correcta y simplemente hay que seguir para adelante” o “el ajuste recesivo” que propone “el PRO con esa alianza extraña con el radicalismo y la Coalición Cívica” o “la tercera alternativa – del Frente Renovador – que es la de proteger el consumo como lo hace el gobierno, pero tomando en cuenta particularmente la inversión de los sectores privados”.

Alertan sobre un “colapso del sistema financiero global”

El abogado estadounidense James Rickards, especialista en temas económicos, expuso en la conferencia que Inversor Global realizó en Uruguay este fin de semana, que se perciben en los “turbulencias” en los mercados que pueden desembocar en un “colapso del sistema financiero global”.

Rickards afirmó que tanto la inflación como la deflación son promovidas desde los bancos centrales y que por la tensión entre estas cuando se presentan de manera simultánea, podrían desatar un nuevo “terremoto” en las finanzas del mundo.

“Una pequeña perturbación en el sistema financiero va a tener un impacto enorme en los mercados globales porque están muy interconectados. Los mercados de capitales deben estar preparados para las dos cosas: la deflación y la inflación, que se compensan y en estas circunstancias actúan como dos placas tectónicas”, indicó el disertante.

Rickards también indicó que la Reserva Federal de Estados Unidos, “tiene que causar inflación” y que “prueba todo y no funciona”. Y añadió que “también ahora amenaza con subir las tasas, lo que causa deflación”.

“No puede colapsar y puede orientar a los inversores hacia múltiples monedas de reservas. Una de ellas puede ser el oro” que si “vamos a su precio correcto, para respaldar el total del sistema, sería de 7.000 dólares la onza. El oro es escaso. Ahora es el momento de pasar a él”, comentó.