La suba de tasas que el Banco Central reavivó en el último mes para quitarle atractivo al dólar ya está impactando en el costo del financiamiento. En el último mes, mientras el organismo monetario buscaba tentar a los ahorristas con un mayor rendimiento por colocar sus pesos en plazos fijos, la tasa de los préstamos de corto plazo a empresas saltó más de 15 puntos porcentuales.

El alza es la mitad de la que registró la tasa de plazos fijos para depósitos de menos de 100.000 pesos, que desde el 7 de marzo al 8 de abril pasó de 33,7% a 41%, una suba de poco más de 7 puntos porcentuales. El rendimiento de los depósitos mayoristas, en tanto, aumentó 11 puntos porcentuales, al pasar de 37% a 48%.

En el mismo lapso, la tasa que cobran los bancos por adelantos en cuenta corriente pasó del 53,7% al 68,5%, volviendo a los niveles de finales de noviembre del año pasado. Esta línea de financiación, que también se lo conoce como el acuerdo por descubierto en cuenta corriente, es la más usada por las empresas para financiar su caja diaria.

Desde el sector industrial, sostienen que la política de tasas altas está ahogando financieramente a las empresas y en mayor medida a las pymes, que quizá no cuentan con una espalda financiera para atravesar este momento.

En marzo, el stock de adelantos en cuenta corriente al sector privado cayó 6.291 millones de pesos y se ubicó en $135.351 millones.
Con la tasa en torno al 68% anual, el costo financiero total, con gastos administrativos, ingresos brutos y demás costos internos se ubica por encima del 95% anual.

Los números muestran que los bancos trasladaron el aumento en la tasa de Leliqs a los préstamos de corto plazo (los más sensibles a los movimientos de tasa), pero sólo la mitad a los plazos fijos.

Después de reuniones con banqueros, y descartada la posibilidad de emitir una letra a 30 días para que los bancos puedan calzar sus depósitos con estos instrumentos, el directorio del organismo habilitó la posibilidad de hacer depósitos por homebanking sin ser cliente de un banco, lo que se prevé reavive la competencia y genere una mejora en los rendimientos en pesos.

Sin embargo, no se vio en las autoridades del Banco Central preocupación alguna por el aumento en las tasas de los créditos al sector productivo.

Fuente: Iprofesional