Por Alejandro Maidana
“El capitalismo por desposesión, impulsa la explotación intensiva de materias primas, planificada, de gran escala y con una altísima destrucción de los bienes naturales comunes, básicamente la tierra, el agua y el aire. Explotación que se repite en toda nuestra Latinoamérica, continuidad de la explotación colonial sobre los sujetos, continuidad en la explotación de los bienes naturales”. David Harvey (Geógrafo y teórico social).
Consideramos pertinente comenzar por el análisis que realiza Harvey sobre el «extractivismo», que atraviesa medularmente a Latinoamérica en su conjunto, para tratar de graficar aquello que insistentemente se viene combatiendo a lo largo y ancho del país. Una práctica que se profundiza dejando un verdadero sembradío de dolor en los territorios arrasados por sus portentosos tentáculos.
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Promesas rotas de un progreso que nunca llegó, pueblos sacrificables que vieron a su alrededor como se multiplicaban la pobreza y el dolor. El saqueo llegaba en los 90 con aroma a modernidad, mientras que la verdadera esencia del mismo, olía a negocio para unos pocos. Como no recordar al ariete de las corporaciones multinacionales, al riojano Carlos Saúl Menem en el Teatro Catamarca en octubre de 1993, cuando anunciaba el despegue definitivo de esta provincia tan postergada. Cabe destacar que el despegue fue similar al de las naves espaciales que iban a llegar a Japón en tan solo una hora.
Si bien los funcionarios locales y nacionales suelen resguardarse en “las regalías” que “derraman” los pulpos mineros, la única verdad, es la realidad supo decir un general que no hubiese visto con buenos ojos el saqueo multinacional al que vienen sometiendo a la Argentina. Décadas de extractivismo para que la pobreza siga aumentando a pasos agigantados, décadas de saqueo que parecen no alcanzar para consolidar una conciencia que sigue lejos de las necesidades básicas de las mayorías.
La meseta patagónica sufre la falta de agua, pero para las mineras parece haber
Mientras que el cambio climático sigue haciendo estragos empujando grandes sequias y temperaturas inadecuadas para la zona, las decisiones políticas pretenden apagar el incendio utilizando nafta. En la meseta no hay agua para los pobladores, la crisis es sumamente preocupante, si bien muchos de ellos tienen pozos de agua, el gobierno no les habilita el vital elemento. Los reclamos vienen siendo sostenidos, pese a ello, desde el gobierno provincial solo ofrecieron silencio.
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Pero claro, a los días virulentos que venían atravesando a la población chubutense, y por ende a la de amplia meseta patagónica, se le sumó la aprobación de la Ley 128 de diversificación productiva de la meseta. Esta ley que propone una zonificación para habilitar la explotación minera en los departamentos Telsen y Gastre, un territorio sin agua, que va a destinar lo poco que le queda, a una actividad expoliadora en todo su abanico. La medida obtuvo 14 votos a favor, 11 en contra y hubo dos ausencias.
El tratamiento express de una medida impulsada por el gobierno provincial, enfureció a quiénes no esperaban tamaña demostración de desidia por parte de quiénes habían prometido no votar por la zonificación. Gases y corridas, represión y una cacería de brujas que se llevó adelante durante toda la noche, fueron las respuestas que partieron desde el estado. La traición se había consumado, y sin licencia social, la minería se hacía de prepo un lugar.
Los y las diputadas que votaron a favor fueron: Juan Pais (Chubut al Frente), Roddy Ingram (Chubut al Frente), Graciela Cigudosa (Chubut al Frente), Emiliano Mongilardi (Chubut al Frente), María Cativa (Chubut al Frente), Carlos Gómez (Chubut al Frente), Gabriela De Lucía (Chubut al Frente), Mariela Williams (Chubut al Frente), Pablo Nouveau (Chubut al Frente), Tatiana Goic (Cultura, Educación y Trabajo), Carlos Eliceche (Visión Peronista), Sebastián López (Integrando Chubut), Adriana Casanovas (Frente de Todos) y Monica Saso (Frente de Todos).
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En contra: María Belén Baskovc (Frente de Todos), Rafael Williams (Frente de Todos), Carlos Mantegna (Frente de Todos), Rosana Artero (Chubut Unido), Leila Lloyd Jones (Chubut Unido), José Giménez (Chubut Unido), Ángel Tirso Chiquichano (Chubut Unido), Manuel Pagliaroni (UCR), María Andrea Aguilera (UCR), Zulema Andén (Chubut al Frente) y Miguel Antin (Chubut al Frente).
La resistencia a la aprobación de la ley de zonificación se extiende y consolida
El gobierno de Mariano Arcioni, quién llegó al poder por su rabiosa postura antiminera, vaya paradoja, nunca dejó de insistir con la zonificación, y si bien la cordillera no se vería afectada, el único río (Chubut) que abastece de agua a las ciudades del centro y el este, estaría jaqueado. Distintos testimonios coinciden en que el propio Arcioni se habría ocupado de quebrar a la provincia, para ofrecer como «salvadora» a la actividad minera. Docentes y trabajadores de salud, entre tantos otros, vienen sosteniendo un plan de lucha encomiable por la pauperización de sus vínculos laborales, realidad que hace que lo antes mencionado, cobre fuerza y relevancia.
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Chubut se despertó y en cada punto cardinal, en cada arrabal, salió a pedir por la derogación de la ley de zonificación. En Rawson ardió la casa de gobierno, en Comodoro Rivadavia la escribanía de Mariano Arcioni fue el lugar elegido para manifestar el descontento. Por lo general el pueblo en su conjunto, al igual que la especie humana, espera encontrarse al límite para decir basta y tratar de torcer el paradigma que lo atormenta y pone en jaque su vida.
Silvia de los Santos es abogada de distintas asambleas, atravesada por un sinfín de sensaciones, no dudó en definir como “triste” lo que está sucediendo en Chubut. “Nos embarga un profundo sentimiento de impotencia, no quedan dudas que esta es la dictadura extractivista, ya que sin represión no podría existir la minería. Se aprobó una ley que no era el proyecto original, por ello la zonificación podría abarcar a toda la provincia. Hablan de regalías excepcionales, pero eso es imposible, ya que una ley provincial no puede pasar por arriba a una nacional, esto va a disparar una verdadera industria del juicio a favor de las mineras.
Todo estaba fríamente calculado, este escenario no fue improvisado, la represión estaba prevista, fue una verdadera cacería humana avalada por el arco político.
El municipio de Puerto Madryn adhirió a una ley que aún no existe, ya que ni siquiera fue publicada en el boletín oficial. “Todo estaba fríamente calculado, este escenario no fue improvisado, la represión estaba prevista, fue una verdadera cacería humana avalada por el arco político. Le disparaban a todos, incluso a corta distancia y en el piso, camionetas sin patentes <chupando> a personas, mujeres muy golpeadas, incluso una periodista que se encontraba trabajando en el recinto en el momento de votación”, indicó.
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No hay otra idea de desarrollo para la meseta, no existen alternativas productivas que no sea la extractiva y contaminante, a pesar que las hay pero se encuentran cajoneadas. “Nos venden la minería como actividad redentora, cuando ya nos vienen estafando con las petroleras y sus supuesta regalías, consta en la justicia distintas causas por corrupción bajo el gobierno de Mario Das Neves”, le dijo a Conclusión Cynthia Francisco, habitante de Comodoro Rivadavia y trabajadora de prensa meses atrás y en una reveladora charla.
Estamos con mucha bronca, esperando que el pueblo en su totalidad se levante contra el saqueo que impulsan desde todos los sectores.
Quién lleva adelante una encomiable labor comunicativa en Chubut, no dudó a la hora de hacerse una serie de preguntas sobre la irrupción de la actividad minera en el lugar. “La discusión sobre las prácticas mineras también abarca a las petroleras ¿Petróleo para cuántos? ¿A qué precio? ¿Quién se queda con el mismo? ¿En que se invierten las regalías? ¿Cuántos litros de agua consume la actividad? De norte a sur, de Andalgalá a Telsen y Gastre, la resistencia y el «No a la minería», irrumpe de manera altisonante en los impávidos oídos de aquellos que a la soberanía y a los derechos constitucionales, los riegan con cianuro.
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Alejandro Jones Huala es integrante activo del Pueblo Nación Mapuche Tehuelche, en contacto con este diario sostuvo que “estamos con mucha bronca, esperando que el pueblo en su totalidad se levante contra el saqueo que impulsan desde todos los sectores. Tenemos que cortar Chubut, paralizar Chubut, porque de este depende el agua para cada uno de los habitantes de este lugar. Fue una traición muy grande la que llevaron adelante los legisladores, por eso ahora nos toca responder como pueblo”.
Tenemos muchos hermanos y compañeros heridos con balas de goma y de plomo, la verdad que para la gente <huinca> esta debería ser una navidad sin navidad
Las distintas comunidades mapuches junto al pueblo consciente, se siguen organizando con la intención de fortalecer la acción para poder resistir unificados. La Patagonia y su espíritu inquebrantable de lucha, prepara una nueva demostración de resiliencia y dignidad. “Esta resistencia va de la mano con el recupero territorial, como así también de la preocupación que nos atraviesa por la creciente sequía en la meseta. La Comunidad Nahuelpan se despertó hace poco, y allí se está llevando adelante un «trawun», una reunión para acordar distintas tomas de decisiones. Lo que sucedió ayer si bien no nos sorprende, ahora está en nosotros brindar la respuesta como pueblo”.
La feroz represión desplegada por la policía de Mariano Arcioni, dejó un importante número de herido y contusos. La violencia como argumento, la democracia de las corporaciones contestando de la única manera que lo sabe hacer. “Tenemos muchos hermanos y compañeros heridos con balas de goma y de plomo, la verdad que para la gente «huinca» esta debería ser una navidad sin navidad. Esto no puede estar sucediendo, en lo particular estamos participando de distintos cortes, durmiendo muy poco, pero entendiendo que es ahora cuando no debemos bajar los brazos. No es casualidad que el asesino del peñi Elías Garay sea un empresario maderero, recuperar y defender el territorio de la voracidad del negocio es nuestra tarea. Ahora es momento para unirnos como pueblo y ponerle un freno a la zonificación”, concluyó Jones Huala.
Fotos gentileza Cynthia Francisco
