El Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumentó 4,8% durante marzo y acumuló un alza de 13% en el primer trimestre del año, informó este jueves el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Además, al comparar las cifras de marzo del 2021 con igual mes del año anterior, la inflación acumulada es del 42,6%, la cifra interanual más alta desde julio pasado. De esta forma, el aumento en los precios registrados durante el tercer mes de este año es el más alto en los últimos doce meses, seguido por los aumentos del 4% registrados en diciembre y enero.

En marzo, los rubros que más aumentaron fueron Educación (28,5) -en virtud de las variaciones observadas
en los servicios educativos de todos los niveles- y Prendas de vestir y calzado (10,8%).

En lo que respecta a Alimentos y bebidas no alcohólicas, el rubro registró un aumento del 4,6%. Aquí incidieron principalmente las subas observadas en leche, productos lácteos y huevos; aceites, grasas y manteca; carnes y derivados; verduras, tubérculos y legumbres; y pan y cereales, pero estos incrementos estuvieron parcialmente compensadas por bajas en frutas.

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Otros rubros que se ubicaron por encima de la media nacional son Bebidas alcohólicas y tabaco (6,4%) y Recreación y cultura (5,3%). La suba en cigarrillos explicó la mayor parte del aumento observado en Bebidas alcohólicas y tabaco, mientras que la reapertura de cines en la mayoría de las regiones incidió en la suba de la división Recreación y cultura.

Debajo del promedio nacional, se encuentran las actividades de Transporte (4,2%); Salud (4%); Equipamiento y mantenimiento del hogar (3,2%); Restaurantes y Hoteles (3,1%); Bienes y servicios varios (2,2%); Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (1,3%); y Comunicación (0,1%).

El alza en Transporte (obedeció principalmente a las subas en la adquisición de vehículos, combustibles, y taxis y subtes en la región Gran Buenos Aires; mientras que los incrementos en Productos medicinales, artefactos y equipos para la salud y en Gastos de prepagas incidieron en el aumento de la división Salud.

En el primer trimestre del año, la actividad que mayores subas registró fue Educación (29,4%), seguida por Comunicación (17,3%); Prendas de vestir y calzado (15,5%); Bebidas alcohólicas y tabaco (15,2%); Transporte (14,2%); y Alimentos y bebidas no alcohólicas (13,8%).

En tanto, en la comparación interanual las Prendas de vestir y calzado subieron un 71,5%; Recreación y cultura un 52%; Equipamiento y mantenimiento del hogar (47,5%); y Alimentos y bebidas no alcohólicas (44,8%).

Al segmentar las regiones del país, el área del Gran Buenos Aires (5,2%) y la Pampeana (4,8%) mostraron aumentos por encima e iguales a la media nacional, mientras que Cuyo (4,3%), Noroeste (4,2%), la Patagonia (4,1%) y el Noreste (3,1%) tuvieron subas por debajo del promedio general.

En la región Pampeana, donde se encuentra gran parte de la provincia de Santa Fe, incluida la ciudad de Rosario, los rubros que más aumentaron sus precios –y en sintonía con lo que ocurrió en el país- fueron Educación (29,7%), Recreación y Cultura (8,8%), Prendas de vestir y calzado (7,1%), Bebidas alcohólicas y tabaco (6,8%) y Alimentos y bebidas no alcohólicas (4,8%).

En tanto, el Transporte aumentó 4,5%; la Salud 4,3%; Equipamiento y mantenimiento del hogar 3,4%; Restaurantes y hoteles (3,1%); Bienes y servicios varios 2,1%; Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles 1,4%; y Comunicación marcó un descenso de -0,5.

Así, en el primer trimestre del 2021 la región Pampeana acumuló un aumento de precios del 13,5% (por encima de la media nacional). En esta misma medición el área del Gran Buenos Aires mostró una suba del 12,6%; el Noreste del 11,9%; el Noreste del 13,5%; Cuyo el 13,4%; y la Patagonia del 12,5%.

En la región Pampeana, los Alimentos y bebidas no alcohólicas subieron en los primeros tres meses del año un 14,8%; las Prendas de vestir y calzado un 12,9%; el Transporte un 15,7%; y la Educación un 29,8%.

Finalmente, está región acumuló una inflación del 44,9% en los últimos doce meses, siendo los sectores de Prendas de vestir y calzado (67,3%); Recreación y cultura (59,2%); Transporte (49,4%); y Alimentos y bebidas no alcohólicas (48,3%), los que más subieron.

Dentro de los productos que más aumentaron sus precios en marzo del 2021 y en relación al mes anterior, se encuentran el tomate redondo (36,8%), la lechuga (16,9%), el queso cremoso (15,8%), el queso sardo (13,9%), la leche fresca entera en sachet (12%) y el yogur firme (10,8%).

En sentido contrario, el limón (-21,8%), la batata (-10,8%), el zapallo anco (-10,6%), la papa (-6,4%), la manzana deliciosa (-5,9%), el tomate entero en conserva (-4,5%) y la sal fina (-3,2%) fueron los productos que mostraron una baja en sus precios.

Herramientas para la caída

El ministro de Economía, Martín Guzmán, había adelantado el pasado miércoles que la inflación de marzo sería “la más alta del año” y pidió a los empresarios “más cooperación” con el objetivo de frenar el alza del costo de vida.

En ese escenario, el Gobierno continúa en la búsqueda de herramientas que puedan poner un freno a la inflación y a la suba de los alimentos y el último martes decidió enviar a inspectores de la AFIP a controlar el cumplimiento del programa de Precios Máximos.

Por disposición del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, también se va a controlar la aplicación de la ley de abastecimiento. A su vez, la administración de Alberto Fernández analiza un aumento de las sanciones.

Por otro lado, Guzmán pronosticó que en abril la inflación bajará, al participar desde Italia, a través de una videollamada, de una reunión del gabinete económico.

El ministro justificó la aceleración inflacionaria en que “hay circunstancias coyunturales que han estado afectando a los precios, incluyendo la inflación en alimentos, que es un problema en el mundo y en particular, en esta pandemia”.

El titular del Palacio de Hacienda explicó, además, que “a esto se le suman comportamientos que deben corregirse”.
Finalmente, elogió a los sindicatos porque “han mostrado un accionar responsable y alineado con los objetivos de la política macroeconómica, que busca una reducción de la inflación gradual y consistente, junto a una recuperación del poder adquisitivo y del salario”.

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