La utilización de la capacidad instalada en la industria se derrumbó en marzo al 51,6%, el promedio más bajo desde el 2002, debido al impacto generado por la emergencia sanitaria impuesta por la pandemia del coronavirus, de acuerdo con datos oficiales.

El indicador descendió 7,2 puntos porcentuales respecto del 58,8% de marzo del año anterior, según el informe difundido este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Según la serie histórica que publica el organismo, en febrero del 2002, la capacidad instalada había caído al 51,1% como consecuencia de la crisis económica que venía sufriendo la Argentina.

En enero de ese año el registro de capacidad instalada había caído al 48,2% y en marzo al 50,3%, para iniciar una recuperación que alcanzó su pico máximo en septiembre del 2011 con un registro del 83,7%.

El registro de marzo se vio afectado sólo parcialmente por la pandemia con lo que en abril, cuando la actividad del sector fue casi nula, volverá a sufrir un descenso importante.

Los bloques sectoriales que presentaron en marzo una utilización superior al nivel general fueron la refinación del petróleo con un 70,8% y la fabricación de papel y cartón con un 68,9%.

Le siguieron la producción de sustancias y productos químicos con 68,5%, industrias metálicas básicas con 58,5%; alimentos y bebidas, 55,6% y productos del tabaco, 53,6%.

La industria automotriz mostró el registro más bajo con apenas un cuarto de su capacidad productiva en funcionamiento, por el freno de las importaciones y la estrepitosa caída del mercado interno, además de la parada técnica por el aislamiento social.

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La fabricación de autos tuvo un nivel de utilización del 25,9%, mientras que la industria metalmecánica, principal proveedora de las terminales automotrices lo hizo al mismo porcentaje.

Entre los bloques sectoriales que se ubicaron por debajo del nivel general, figuraron también la edición e impresión, con un 50,4% y la producción de artículos de caucho y plásticos con 39,8%.

El desplome de la industria de la construcción provocó también que la producción de insumos para el sector registrara un promedio del 42,1%.

El uso de servicios públicos, en descenso

La utilización de servicios públicos registró en febrero último una baja del 2% respecto del mismo mes del 2019, y acumuló 22 meses consecutivos de caída, informó este miércoles el Indec.

El Indicador Sintético de Servicios Públicos difundido por el organismo registró en cambio una leve suba del 0,7% en febrero respecto de enero, la primera variación positiva desde julio del 2019, cuando tuvo un alza similar.

El consumo en servicios públicos no registra aún el impacto de la cuarentena iniciada el 20 de marzo último.

En marzo último, como consecuencia del aislamiento social, el transporte de pasajeros bajo cerca del 80%, como también los indicadores de utilización de energía y gas, como consecuencia del freno a la actividad industrial y el comercio.

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Entre los sectores de actividad económica que componen el indicador, en febrero respecto de igual mes del 2019, la demanda de energía eléctrica, gas y agua registró una suba de 3,1%, el transporte de carga creció 3,4% y los vehículos pasantes pagos por peajes se incrementaron 7,7%.

En cambio mostraron variaciones negativas en la comparación interanual la recolección de residuos, que se contrajo 7,9%, el transporte de pasajeros, que cayó 5,6%, el servicio del correo postal, con una baja de 1,9%, mientras que el sector de telefonía registró un descenso del 3,5%.

En la comparación de febrero con enero, la demanda de energía eléctrica, gas y agua registró una suba del 1,5%; el transporte de pasajeros tuvo un aumento de 1,9%, los vehículos pasantes por peajes crecieron 0,9%, el servicio de correos tuvo un aumento del 5,4% y el de telefonía registró un incremento de 0,3%.

Contra enero pasado, la recolección de residuos registró una variación negativa del 3,1% y el transporte de carga una baja de 9,8%.