Por Andrea San Esteban

Es claro que la liquidez circulante en las capas medias, días antes de las elecciones, generaron “una burbuja” y una “sensación de seguridad económica”. Con dinero líquido en la plaza y en el bolsillo, la sociedad se volcó a Cambiemos.

El 18 de julio, el BCRA enfrentó la refinanciación de Lebacs por $ 532.000 millones, acosado por la meta oficial de la inflación a 17 por ciento, pero llegada la noche de ese martes, no renovó la totalidad de los bonos, solo el 80 por ciento.

El dinero que pudo conseguir con esa especulación, en una plaza seca, lo volcó al circuito interno y fueron unos $ 81.000 millones.

Especulación y bicicleta financiera

Para el ministro de Finanzas, Luis Caputo, al gobierno “le queda cómodo” el dólar alto ya que el Banco Central de la República Argentina, “lo puede manejar tranquilamente”, así el carry trade se vuelca a los bonos, “porque son muy pocos los que traen dólares para comprar Lebacs”. Quien compra bonos no lo hace en la divisa extranjera, lo hace en pesos. Es claro entonces que los pesos ingresan al Central y se utilizan para volcarlos al mercado, en caso de necesitarlo.

Según el Informe mensual de las subastas de Lebacs de la Gerencia de Operaciones Monetarias, del Banco Central De la República Argentina, correspondiente al 16 de agosto de 2017, las propuestas alcanzaron un nivel de Valor Nominal de $ 453.751 millones, adjudicándose VN $ 453.416 millones, lo que implica la renovación parcial del vencimiento que era de VN $ 534.983 millones y una baja en el stock en circulación por VN $ 81.567 millones.

Las tasas de corte se ubicaron en 26.50%, 26.50%, 26.50%, 26.25%, 25.95% y 25.85% para los plazos de 35, 63, 91, 154, 217 y 273 días, respectivamente.

Dado el cambio operativo vigente a partir de febrero pasado – en donde las subastas de Lebacs pasaron de semanales a mensuales – la expansión o

contracción que puede generarse con cada subasta, debe ser analizada en conjunto, tanto con las operaciones de mercado abierto como también

con las operaciones de pase que realiza este BCRA. La duración promedio se incrementó a 72 días.

Traduciendo el panorama político en económico, con la fundamentación de los datos oficiales, vemos que algunos sectores de trabajadores desocupados se preguntan porqué alcanzó una ventaja en las Paso, el actual gobierno.

Caputo lo define claramente cuando dice, «se generó mucha incertidumbre en el último mes y medio», pero con las medidas generadas por parte de Federico Sturzenegger, en cuanto al desarrollo del mercado de capitales, «la votación es un ‘despiértense’ para los empresarios argentinos» y la gente con dinero en el bolsillo vuelve a respirar.

El día después de las elecciones, el dólar había bajado, la plaza seguía árida y los trabajadores desocupados en las carpas.