En el segundo trimestre del 2023, la desocupación en el área del Gran Rosario fue del 5,3% y afectó a 36.000 personas: en relación al período comprendido entre enero y marzo de este año, el indicador bajó un 2,6%. En tanto, la tasa de empleo en la región fue del 47,6%, 0,6 puntos porcentuales por encima del trimestre anterior, según informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).

Entre abril y junio, la tasa de actividad (TA) –que mide la población económicamente activa (PEA) sobre el total de la ciudadanía– alcanzó el 50,2% en el Gran Rosario. Asimismo, la tasa de subocupación resultó del 6,2% de la PEA, mientras que los ocupados demandantes alcanzaron al 9,4%.

En tanto, la presión sobre el mercado laboral, conformada por el universo de desocupados, subocupados (ocupados que trabajan menos de 35 horas semanales y están dispuestos a trabajar más horas), ocupados demandantes (que trabajan menos de 35 horas semanales, desean trabajar más horas y además están buscando activamente otra ocupación) y los subocupados no demandantes disponibles, alcanzó el 22,7% de la PEA.

El conglomerado del Gran Rosario cuenta con una población total del 1.345.000 de personas, de las cuales 675.000 son económicamente activas, es decir que están en condiciones de trabajar. De ellas, 639.000 son ocupadas (contra 631.000 en el trimestre pasado); 36.000 son desocupadas (contra 54.000 entre enero y marzo de este año); 64.000 son ocupadas demandante de empleo (contra 70.000 en el trimestre anterior); y 42.000 son subocupadas (contra 51.000).

Las nuevas cifras dan cuenta que la desocupación en el Gran Rosario durante el segundo trimestre cayó 2,6% en comparación al período comprendido entre enero y marzo, cuando esta situación afectaba al 7,9% de la población. Al hacer un repaso sobre la variable en los últimos meses, se observa que entre octubre y diciembre de 2020 el desempleo fue del 13,6%; entre enero y marzo del 2021 descendió al 10,9%; en el segundo trimestre volvió a subir al 11,8%; entre julio y septiembre bajó al 7,8%; en el último trimestre del 2021 cayó al 7%; para dispararse al 7,9% entre enero y marzo del 2022; desplomarse al 4,3% entre abril y junio pasado; volver a repuntar en un 6% en el tercer trimestre de 2022; y cerrar el año en 6,3%. 

Al analizar región por región, se observa que la mayor tasa de desocupación se dio en el Gran Buenos Aires (6,7%); seguido por la región Pampeana (6,8%); el Noroeste (5,1%); el Noreste (4,3%); la Patagonia (4,3%); y Cuyo (4,1%).

En tanto, los conglomerados con mayor índice de desocupación fueron el Gran Córdoba (8,3%); Mar del Plata (8,3%); Gran Santa fe (8,1%); los Partidos del Gran Buenos Aires (7,5%); Río Cuarto (7,3%); y Rawson – Trelew (7,1%).

LOS DATOS A NIVEL NACIONAL

En el segundo trimestre del año, la tasa de desocupación en todo el país fue de 6,2% –afectando a 900.000 argentinos– mientras que la tasa de ocupación fue del 44,6% (mostrando una baja del 0,4% en relación al primer trimestre del 2023).

Para realizar este informe, el Indec relevó 31 aglomerados urbanos, en donde viven 29,4 millones de personas. De este estudio se desprendió que, en el segundo trimestre de 2023, la tasa de actividad alcanzó el 47,6% (14.600.000 personas) y la tasa de empleo se ubicó en 44,6% (13.100.000 personas). Asimismo, la tasa de desocupación se ubicó en 6,2% (900.000 personas), un 0,7% por debajo de la cifra registrada en el primer trimestre del año.

La tasa de subocupación resultó del 10,6% de la PEA, mientras que los otros ocupados demandantes y los otros ocupados no demandantes disponibles alcanzaron, en conjunto, el 11% de la PEA. Consecuentemente, la presión sobre el mercado laboral, conformada por el universo de desocupados, subocupados, ocupados demandantes y ocupados no demandantes disponibles, alcanzó el 27,9% de la PEA.

Al observar las poblaciones específicas, la tasa de actividad para los varones fue de 69,8%, mientras que para las mujeres fue del 51,5%. A nivel geográfico, las regiones que presentaron mayores tasas de actividad fueron la Pampeana (49,2%), Gran Buenos Aires (47,6%) y Cuyo (47,0%). Por su parte, la que presentó la menor tasa de actividad fue Noreste (44,4%).

Entre la población ocupada, el 74,2% son asalariados, de quienes el 36,8% no cuenta con descuento jubilatorio. Por otra parte, el 22,3% trabajan por cuenta propia, el 3,2% son patrones y el 0,3% son trabajadores familiares sin remuneración.

Entre los asalariados ocupados, el 4,5% utilizó sus propias maquinarias/equipos para realizar su trabajo. Al mismo tiempo, del total de ocupados, el 9,1% trabajó desde la vivienda.

Al analizar la población ocupada por nivel educativo, más de la mitad de las personas (60,8%) cuenta con hasta secundario completo, mientras que el 39,2% posee estudio superior y universitario (completo o incompleto).

En referencia al nivel educativo de las personas desocupadas, el 68,3% cuentan con hasta secundario completo, y el 31,7% presentan nivel superior y universitario, completo o incompleto. En cuanto al tiempo de búsqueda, el 66,4% lleva buscando empleo entre 1 y 12 meses, mientras que el 33,6% lleva más de un año.