El diputado por el Frente Renovador y referente de la Unión Industrial Argentina (UIA), José de Mendiguren, advirtió hoy sobre las consecuencias de una apertura indiscriminada de importaciones en el sector textil, el cual, según destacó, da trabajo a por lo menos «medio millón de personas».

Además, precisó que «la negociación, la visión estratégica de un sector de mano de obra intensiva, ese es el camino a recorrer», y subrayó que el caso Nike «es un ejemplo de que se puede convivir (producción nacional e importación) si la negociación es firme y se tiene en cuenta el interés natural».

En ese sentido, sostuvo que defenderá «a muerte» las políticas proteccionistas, al argumentar que la llegada de productos importados sin «duda» podría poner en peligro los empleos.

«Quedó demostrado que esas políticas dan resultado», destacó el vocal de la central fabril UIA.

Así lo sostuvo luego de que se conociera que diferentes marcas internacionales habían vuelto a posar la mirada en la Argentina tras el anuncio del próximo gobierno sobre la eliminación del sistema de las Declaraciones de Anticipo de Importaciones (DJAI).

Precisó que el salario promedio del sector oscila entre los 8 y 10 mil pesos equiparable a unos 1000 dólares, frente a los «80 dólares que cobran en los países de dumping».

«En el mundo, si no hay decisión política desaparece la industria textil», concluyó.