El Grupo Oroño anunció esta semana cancelar su relación con la prepaga Osde, cuyos afiliados dejarán de recibir atención en los dispensarios y centros médicos dependientes del grupo empresario. La firma explicó la medida a partir de la retracción de los aranceles de la prepaga en cuestión, cuya decisión supuestamente perjudica en el pago de los honorarios y sostenimiento de la prestación del servicio.

Por medio de un comunicado, el consorcio de medicina privada rosarino explicó que “Osde ha tomado la decisión unilateral de retrotraer el aumento oportunamente consensuado y otorgado en el mes de abril, correspondiente a aranceles de prestaciones médicas” lo cual “atenta contra el sostenimiento de prestaciones y honorarios médicos”.

La suspensión afectará a todos los planes de la prestadora y se aplicará en todas las instituciones que gestiona: el Sanatorio de Niños, CEN, Sanatorio Parque, CER, Cibic, GO Sanatorio Funes, GO Oftalmología, GO Centro Médico Alto Rosario, GO Centro Médico Jockey Club, GO Centro Medico San Lorenzo, Fertya, Maternidad Oroño ,Diagnóstico Médico Oroño, Elas, el Instituto Cardiovascular de Rosario y GO consultorios ambulatorios.

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No obstante a la suspensión de las prestaciones, la firma aclaró que se mantendrán los “tratamientos en curso a pacientes crónicos, oncológicos, turnos pacientes con discapacidad, embarazos en tercer trimestre e internados en curso” y se respetarán los turnos ya programados para el área de cirugía desde el 1 de mayo hasta el mediodía del jueves 2 de mayo.

Nicolás Villavicencio, titular del Grupo Oroño.

Al margen del origen de la desvinculación, Grupo Oroño negó en el mensaje difundido este martes que la medida tomada pretenda “requerir aumentos en las cuotas de los afiliados” de Osde.

Nicolás Villavicencio, presidente de Grupo Oroño, apuntó en declaraciones radiales que la decisión de Osde es de “extrema gravedad” y reveló que ambas firmas negociaron las condiciones de su relación hasta el martes por la noche inclusive, pero los diálogos no llegaron a buen puerto y terminaron en la suspensión de los servicios.

Esta situación resultó de las reacomodaciones en las cuotas a sus clientes por parte de las empresas de medicina prepagas las cuales fueron acusadas de cartelización por parte del Gobierno nacional, que previamente había librado los valores de los aranceles a cobrar: “Ellos quieren hacer ese esfuerzo, que los obliga a hacer el Gobierno, bajando los valores a los prestadores y facturados en el mes de abril, una situación muy perjudicial para los prestadores”, se quejó el empresario y agregó: “Pese al esfuerzo del gobierno por desacelerar la inflación, nos deja sin margen de maniobra a los prestadores”.