El último Informe de Coyuntura del  Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral), de la Fundación Mediterránea advierte que «los problemas financieros encienden luces de alarma» en la industria y particularmente en las pequeñas y medianas empresas»·
Según detalla la periodista Liliana Franco en el diario Ámbito Financiero, en el trabajo de Ieral se apunta al crecimiento de la cartera de crédito irregular, el cierre de empresas y la “dinámica explosiva” que tuvieron los costos financieros sobre los resultados de las empresas, especialmente durante los últimos dos años de la gestión de Mauricio Macri.
El documento publicado por Ieral sostiene que el pobre desempeño en lo que hace al nivel de actividad en últimos trimestres se ha comenzado a hacer sentir en los niveles de irregularidad en el crédito de las empresas: situaciones de atraso y riesgo de insolvencia entre otros.
Además el informe refleja que se registra un empeoramiento de los niveles de créditos en situación irregular, que pasó de 3,8% del volumen de préstamos a sectores industriales a mediados de 2018, a 6,5% en el tercer trimestre 2019. En ese sentido, desde Ieral se plantea si lograrán sobrevivir las empresas en este contexto macroeconómico y señala la pérdida de capital productivo registrada en los últimos años, como resulta del aumento en la cantidad de quiebras y la reducción en el número de empleadores. En ese sentido, las cifras oficiales revelan que entre 2017 y 2019 se observa una reducción de alrededor de 20 mil empleadores de menos de 100 empleados.
A partir del estudio de los estados contables de 14 empresas vinculadas a la industria que tienen actividad bursátil, los autores del informe llegaron a la conclusión que “los costos financieros tuvieron una dinámica explosiva en comparación con los resultados operativos de las firmas en los dos últimos años”. Mientras en 2014-2017 dichos costos representaron entre 48% y 55% del resultado operativo, en 2018 el peso creció hasta 105% y en 2019 a 191%, “reflejando una enorme carga financiera para empresas en los últimos dos años”.El trabajo reseña que la situación empeoró especialmente desde el segundo trimestre de 2018, cuando fuertes subas del tipo de cambio y por ende de la inflación, deterioraron el poder adquisitivo de los ingresos fijos de la población, y por esa vía el consumo y la actividad económica.

La reducción de tasas observadas en las últimas semanas provee un paliativo, pero el informe considera que “no resulta suficiente dados los problemas acumulados”.