El Riesgo País de la Argentina, que elabora la banca estadounidense JP Morgan, se disparó hasta los 758 puntos básicos y podría volver a subir por la incertidumbre que tienen los inversores acerca del futuro de la Argentina.

A pesar de que la restrictiva política monetaria diseñada por el Fondo Monetario Internacional (FMI) y ejecutada por el Banco Central logró estabilizar la situación cambiaria dentro de márgenes preestablecidos, el indicador de riesgo del país no cesa su escalada y se ubica en los niveles más elevados de los últimos años.

Solo durante la última corrida cambiaria registrada a fines de agosto pasado el indicador de la JP Morgan par la Argentina tuvo anotó un nivele más elevado, cuando tocó los 783 puntos básicos el 5 de septiembre. Además, el indicador lleva acumulada una suba del 53% durante la gestión de Mauricio Macri.

>Te puede interesar: La pobreza en Argentina se encamina a una de las peores mediciones de la década

El Riesgo País es ni más ni menos que el costo «extra» que tienen que pagar el Estado nacional, las provincias o las empresas argentinas si salen a colocar deuda, respecto de lo que rinden los bonos de la plaza más «segura» para los inversores, que es Estados Unidos.

Sin contemplar futuros préstamos o renegociaciones de vencimientos, los compromisos de pago de deuda ascienden a 24.945 millones de dólares en 2019 y a 21.406 millones de dólares en 2020.

Asimismo, el país debe abonar otros 25.114 millones de dólares en 2021; 25.308 millones de dólares en 2022 y 18.642 millones de dólares en 2023.

El nivel que alcanzó el Riesgo País genera alarma en Cambiemos, que cumplió tres años en el poder el lunes: es que el 10 de diciembre del 2000, casi un año antes de la crisis que terminó con el mandato del ex presidente Fernando De la Rúa, el indicador fue de 794 puntos.