El Ejecutivo municipal, representado por el secretario de Hacienda, Santiago Asegurado, presentó este jueves en el Concejo el proyecto de Presupuesto 2019.

En una reunión en la cual el acceso a la prensa estuvo restringido, el funcionario expuso ante la mayoría de los ediles que conforman el cuerpo legislativo local el documento en el cual se prevé, según supo Conclusión, una suba en la TGI y otras tasas municipales en torno al 35%, y que pasa de un gasto de 16 mil millones en 2018 a 24 mil millones previstos para 2019.

Además, el detalle del expediente sigue pautas de Nación respecto a valor de dólar, crecimiento económico, inflación y otras variables macro.

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Los tiempos institucionales marcan que el presupuesto debe ser presentado para su análisis y posterior aprobación en Concejo Municipal entre finales de septiembre y principios de octubre, pero se dilató principalmente para esperar la definición de las partidas votadas en la “Ley de leyes” a nivel nacional primero, y lo pautado en el escrito provincial después, para saber “a ciencia cierta” con cuántos recursos coparticipables se iba a contar.

“Es un tema prioritario el Presupuesto, y dentro del mismo analizar que ajuste merecerá la cuestión de la tasa municipal, porque la inflación ha sido desbordante este año. Por otro lado todo lo que esté vinculado al transporte y financiamiento es un tema clave”, dijo a Conclusión el edil Horacio Ghirardi, quien preside el bloque oficialista.

De lo detallado por Asegurado ante los ediles presentes en el Salón de los Acuerdos del Palacio Vasallo este jueves, se desprende que se tomarán recursos del pago de patentes de automotor para destinarlas a subsidiar el sistema de transporte urbano, que quedó “rengo” luego de que se recortaran los aportes desde Nación.

También se discutirán cambios respectivos al Drei que pueden llegar a ser destinados al mismo fin.

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El concejal Eduardo Toniolli había presentado semanas atrás un proyecto para duplicar la alícuota del Drei a los bancos: de esta manera las arcas municipales contarían con 350 millones extras. Según aduce el edil justicialista, eso podría “morigerar el aumento previsto de la TGI”.

“Nosotros insistimos en que deben colaborar aquellos sectores de nuestra vida económica que vienen teniendo ganancias extraordinarias, entre ellos el sistema financiero”, sostuvo.

Por su parte, la concejala Germana Figueroa Casas, que integra el bloque Cambiemos y se encarga de los temas financieros, explicó a Conclusión que “en un impuesto hay dos partes, un porcentaje que paga y una base a la que se aplica, las entidades financieras tienen un tratamiento que es por una diferencia, según dijo el secretario de Haciend esa forma iba a cambiar para parecerse a cómo se calcula en provincia y eso implicaría que paguen mas; entonces preguntamos para comparar con la otra posibilidad (lo que plantea Toniolli), lo vamos a empezar a analizar a partir de mañana”.

Respecto al “aumento” de la patente automotor, la edila de Pro detalló que se trata de “un impuesto provincial, pero que recauda la municipalidad, tenía 5 cuotas años atrás, luego pasó a 6, y esa 6ta cuota era del 6 %, este año se cambio y puede ser hasta 20%, lo que plantea el municipio es tomar ese monto extra para aplicar al fondo de transporte”.

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Lo cierto es que por todas estas cuestiones y algunas otras que no son de “digestión rápida”, el análisis podría extenderse más de una semana, por lo cual para aprobar este año el Presupuesto deberían llamarse a sesiones extraordinarias.

Si bien los ediles confían en “poner todo” para que “la ciudad tenga el presupuesto votado cuanto antes”, el tratamiento podría dilatarse, sobre todo teniendo en cuenta que se entra en un año electoral y el cuerpo legislativo, con sus distintas fuerzas políticas, ya parece haber entrado en clima de campaña. “La mitad de nada es nada”, escucharon concejales oficialistas de boca de algún opositor ante el pedido de que el proyecto se apruebe en totalidad y prontitud.