En informe titulado «Servicio público de gas. Balance 2017-2016 y comparación histórica», el Observatorio Oetec demuestra que en 2017 el consumo residencial de gas natural registró la peor caída desde 1993. «Se trata, nada más ni nada menos, que del desplome más fuerte de los últimos 24 años», explica Federico Bernal, director del Oetec.

En relación a 2016, el descenso en el consumo de gas natural por parte de los hogares argentinos fue del 11,1%. Una cifra bastante más preocupante si se tiene en cuenta que venía de un crecimiento interanual del 6% en 2015. Esa caída es la peor desde 1993: