Enviado especial a Buenos Aires – La ministra de Salud y Desarrollo Social de la Nación, Carolina Stanley, destacó este martes en el Salón de las Provincias del Senado “lugar central que tiene la inversión social en el Presupuesto”, donde según precisó, “el 77% del gasto primario se destina a servicios sociales”.
Stanley estuvo secundada por el secretario de Salud Adolfo Rubinstein durante la presentación que realizó en la Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado. El director ejecutivo de la ANSES, Emilio Basavilbaso; y la titular del Instituto Nacional de las Mujeres (INAM), Fabiana Túñez, acompañeron a la titular de Salud y Desarrollo Social.
Para la funcionaria, “el Estado tiene que estar presente, acompañando y brindando respuestas específicas”, y fundamentó que están «conscientes de la difícil situación que atraviesan muchas familias”.
La ministra, subrayó que “la inversión social aumenta un 32%; la seguridad social un 35%; y la salud un 29%”, y agregó que el presupuesto del ministerio que conduce se amplía en 2019 en un 34,2%, incluyendo la Seguridad Social.
Y añadió que hay “más de 4 millones de niños cubiertos por la Asignación Universal por Hijo (AUH)”, lo que significa “la máxima cobertura histórica”.
Respecto de la distribución de los fondos, Stanley desagregó los conceptos a los que se destinarán las partidas “2 billones 86.512 millones de pesos para Seguridad Social; 229.303 millones para Educación y Cultura; 149.697 millones para Salud; 275.562 millones para Ciencia y Técnica; 28.800 millones para Vivienda y Urbanismo; 24.400 millones para Agua Potable y Alcantarillado; y 10.734 para Trabajo”.
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Por otra parte, la titular del flamante ministerio de Salud y Desarrollo Social anunció el Plan de Prevención de Embarazo No Intencional en la Adolescencia, y en ese sentido detalló que “109 mil adolescentes y 3.000 niñas menores de 15 años tienen un hijo cada año”, lo que representa “el 15% de los nacimientos anuales”.
Stanley precisó además que “7 de cada 10 de estos embarazos adolescentes no son deseados”, y en el caso de las niñas menores la cifra asciende a “8 de cada 10” embarazos no intencionales.
