Los corralones de la ciudad advierten faltantes en materiales de la construcción. Según señalan, la demanda supera lo que pueden recibir de los proveedores. Desde el sector apuntan que muchas personas comenzaron a construir «a partir del desdoblamiento del dólar».

«Hay un parate en la provisión de materiales. En el contexto de pandemia uno diría que lo lógico sería que no haya dinero y la construcción se frene, pero todo lo que vivimos hoy es todo lo contrario. Tenemos más demanda de lo que nos pueden proveer nuestros proveedores», contó Matías Nuñez, titular del corralón La Elena, en dialogo con Conclusión.

Según aseguró, el faltante no está relacionado a una menor actividad de las fábricas, ya que -dicen los proveedores- están produciendo a su máximo nivel.

«Pasa que hay más demanda que oferta. La gente vio que la plata se le va por la inflación y todavía los precios de los materiales no se han acomodado a lo que vale el dólar hoy. Eso quiere decir que construir está barato, al menos por un tiempo, y todos están aprovechando», describió el titular del corralón ubicado en Eva Perón 7299.

Al ser consultado por el momento en el que comenzó a incrementarse la demanda, Nuñez explicó que «fue a partir de que se desdobló el dólar», porque «la gente vio que no podía poner sus ahorros en ningún lugar y no podía comprar dólares, así que empezó a llevar a la construcción la plata que tenía».

«El dólar -continuó- se escapó y los precios están por debajo, eso hace que la demanda explote. Más sumado a que la gente no tiene dónde invertir su dinero. En la parte financiera las tasas están muy bajas y el dólar es difícil comprarlo, tenés que ir al blue que es carísimo, entonces la gente se resguarda en materiales. Al quemarle la plata, hace la pileta o una reforma».

Por otra parte, Nuñez contó que los proveedores de cemento dicen que el nivel de venta de bolsas está en un récord histórico. Un hecho que evidencia que las obras que se están realizando son construcciones pequeñas. 

A este dato hay que sumarle el contexto, atravesado de manera ineludible por la pandemia. La obra pública, detallan desde La Elena, está en niveles muy bajos, pero la obra privada también. Empresas de construcción se enfrentan a diario con las limitaciones establecidas por los protocolos sanitarios y deben reducir su nivel o ritmo de actividad.

Al momento de puntualizar cuáles son los faltantes, Nuñez aclaró que «de todo material hay algo», pero igualmente «hay problemas con los ladrillos, el cemento, hierro, malla, de todos los materiales». La razón del inconveniente con cada material es la misma: una mayor demanda. «No es que no se está produciendo», reiteró el titular del corralón.

Respecto a los precios y la manera en que los fijan, el referente de La Elena aseguró que no especulan, lo que les permite cumplir con los clientes. «Hoy nuestra preocupación es conseguir más material para ellos», afirmó.