Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires – Según datos Cámara Industrial de Manufacturas de Cuero y Afines (Cima), la capacidad instalada se encuentra en el 49% y desde el 2015 se perdieron 3.500 puestos de trabajo y se cerraron 130 fábricas y talleres. En toda la cadena de valor del cuero, que incluye calzado y curtiembres, se perdieron 16.000 empleos.

El titular de Cima, Ariel Aguilar, sostuvo a Conclusión que «está más que claro que con la devaluación, el sector no gana competitividad, porque está dolarizada la estructura productiva, el cuero se paga en dólares, la tarifas en dólares, así se puede corroborar que el 80% de los sectores de la producción se encuentran en la misma encrucijada».

Según datos estadísticos del sector de las manufacturas del cuero y toda su cadena de valor, desde el 2015 la caída en ventas, empleo y cierre de empresas no se ha detenido. Además, las importaciones, los costos de servicios e insumos aumentaron de manera exponencial. 

A pesar de que Argentina «hoy tiene un dólar 5 veces más caro, las importaciones no subieron, y la baja del consumo interno golpeo a la producción, en general el 80% era consumido dentro del país», precisó Aguilar. 

En materia importaciones, desde el 2015 se produjo una suba del 121 por ciento en unidades, lo que representa un total de 34.530.000 millones de productos adicionales que entraron al país comparando 2015 con 2018, último año consolidado.

”Como demuestran los datos, nuestro sector no estaba cerrado al mundo, sino que convivíamos con casi 30 millones de unidades importadas y existía mercado para los dos. Es necesario abandonar las mentiras y los prejuicios ideológicos y plantear una reforma en la administración inteligente del comercio”, aseguró Ariel Aguilar, presidente de Cima.

En el mismo sentido el dirigente de Cgera, destacó que en el sector de las manufacturas del cuero, «la producción cayó 20% en 2016 producto de las importaciones, en 2017 un 10% más, en el año 2018 el 30% y en 2019 el 20%. Es una locura».

En cuanto al consumo y mercado interno la situación continúa siendo crítica. En el primer semestre de 2019 las ventas de las empresas del sector cayeron un 20% respecto a los primeros 6 meses de 2018.

Respecto de la cantidad de pymes que cerraron por causa de la política del Gobierno, «alcanzó a 130 fabricas que terminó con el empleo de alrededor de 4000 trabajadores».

«En calzado se perdieron más de 9000 puestos de trabajo y en curtiembre se perdieron más de 3000, sumada toda la cadena de producción llega a los 16 mil trabajadores despedidos», indicó Aguilar.  

Asimismo, el relevo de Cima indica que las exportaciones durante el primer semestre de 2019 cayeron un 16,33 % en dólares, comparado con igual período de 2018. En este primer semestre del año se ha exportado la modesta cifra de U$S 10.700.000, mientras que en el año 2008 el Sector llegó a exportar al mundo más de 110 millones de dólares en el año 2008. Es decir que el sector ha perdido tanto en el mercado interno, como posibilidades de ventas al exterior.

Otros sectores como el pan, explica Aguilar, «no compite con importaciones, lo afecta la falta de consumo, pero en el caso del calzado, fue reemplazado por los importados».

«A diferencia de lo que ha ocurrido en otras devaluaciones a lo largo de la historia argentina o lo que está sucediendo entre China y EEUU, la devaluación de estos tiempos no ha generado competitividad debido a que en los últimos años se ha dolarizado toda la estructura de costos de nuestra industria. Insumos y tarifas están dolarizados, entonces la devaluación de nuestra moneda nos vuelve más caros y nos quita posibilidades de ventas, tanto al exterior como al mercado interno», concluyó el Presidente de Cima.