La República Argentina renovó este viernes en Beijing el swap de monedas con China por 130.000 millones de yuanes, equivalentes a un total de US$ 19.000 millones, por el plazo de tres años, confirmó el Banco Central (BCRA).

La suscripción del acuerdo de monedas con el Banco Popular de China (PBoC por sus siglas en inglés, la entidad monetaria equivalente al BCRA) prevé una ampliación de los fondos de libre disponibilidad de 5.000 millones de dólares (35.000 millones de yuanes).

Esa cifra se suma a los 5.000 millones para ese uso que ya estaban vigentes desde el acuerdo de monedas anterior, celebrado en el año 2020.

Por esta razón, la Argentina contará a partir de hoy con 10.000 millones de dólares para, entre otras necesidades, evitar el uso de dólares en las operaciones comerciales ligadas al mercado chino.

En el caso del segundo lote de 5.000 millones de dólares incrementado este viernes, la Argentina podrá operar con esos fondos «una vez que se agote el primer tramo», destacó hoy el BCRA a través de un comunicado.

La renovación, así, permitirá un uso de libre disponibilidad por 5.000 millones de dólares, pero con la garantía del banco oficial de China de que la Argentina podrá disponer de otros 5.000 millones si llega a necesitarlo.

Massa y Pesce reunidos con las autoridades chinas.

El acuerdo fue informado oficialmente por el Banco Central a través de un comunicado; en paralelo, los integrantes de la comitiva oficial de gira por Beijing ratificaron la noticia y dieron más detalles en un encuentro con la prensa que cubre el viaje.

Esta decisión supone una inyección de fortaleza con repercusiones políticas que, en lo inmediato, permitirá que el BCRA disponga de yuanes equivalentes a 10.000 millones de dólares para el comercio exterior con China.

Esto, a su vez, hará posible que la divisa estadounidense de las reservas del Banco Central sea utilizada para otros fines, como prevenir corridas o intervenir frente a variaciones en la cotización de los dólares financieros.

Qué es el swap

Cabe tener en cuenta el contexto en el que aparece este acuerdo. Una de las principales problemáticas que afronta el gobierno nacional en los últimos años está asociada a la constante caída de las reservas internacionales. En ese marco, esta medida permitiría descomprimir el uso de moneda estadounidense y hacer operaciones con yuanes bajo respaldo del Banco Popular de China.

Un swap -cuya traducción a español es «intercambio»- consiste en ser un mecanismo por el cual dos agentes (que pueden ser gobiernos, bancos, o empresas) se comprometen a cambiar divisas o dinero en ciertas fechas. Dicha operación no se efectúa de forma inmediata sino que se realiza en “cuotas”, es decir montos y fechas previstas a lo largo de un período acordado.

Al finalizar el intercambio financiero, el BCRA deberá reintegrar la cantidad de yuanes utilizados y, al mismo tiempo, China deberá recomponer el total de pesos recibidos.

La utilidad de este mecanismo es que la Argentina puede pagar las importaciones de este país con esos yuanes, sin recurrir a los dólares.