El ministro de Energía, Juan José Aranguren, reiteró hoy que en los casos en que hubo contrataciones del sector público en las que participó la empresa Shell, en la cual se desempeñó hasta mediados de 2015, se abstuvo de intervenir personalmente o a través de otro funcionario de la cartera mediante su autorización.

El ministro volvió a referirse a su «abstención de intervenir en temas particularmente relacionados con Shell», al responder la columna de opinión del diario La Nación titulada «Controlar para evitar al corrupción» del director del Observatorio de Calidad Institucional de la Escuela de Política, Gobierno y Relaciones Internacionales de la Universidad Austral, Marcelo Bermolén.

En una carta publicada en la web del Ministerio de Energía, Aranguren afirma: «No ha habido ninguna contratación particular realizada por mí o con mi autorización desde el Estado Nacional con la empresa Shell o alguna de sus empresas vinculadas».

«En todo momento cumplí con mi deber de abstención de intervenir en temas particularmente relacionados con Shell, como lo indica la Ley de Ética en el ejercicio de la función pública. En los casos en que hubo contrataciones en las que participó la empresa Shell relacionadas con entidades del sector público, no hubo ninguna participación de mi parte», aseguró el ministro.

Como ejemplos, el ministro citó las compras de combustible líquido por parte de CAMMESA que fueron licitadas por YPF y sin su participación constatada por la Sindicatura General de la Nación; así como las compras de GNL encarado por Enarsa, en las que dio intervención al Ministro de Producción (subrogante por mi excusación en temas vinculados a Shell) así como a la Oficina Anticorrupción y a la SIGEN.

La excusación de Aranguren para intervenir en los casos en que tenga participación Shell se formalizó con el decreto 1006/2016 para evitar cualquier conflicto de intereses y, frente a una recomendación de la Oficina Anticorrupción, al tiempo que se desprendió de las acciones que poseía de la petrolera.