Heladerías de Rosario reclaman por el costo de las comisiones de las aplicaciones de reparto, las cuales alcanzan un 30% del precio del producto, abonado por el consumidor.
Para trabajar en ese sentido, desde la Cámara Industrial y Comercial del Helado Artesanal (Cicha) iniciaron las gestiones con la provincia con el fin de llegar a un acuerdo con las empresas de aplicaciones. En virtud de esto presentaron un escrito a la Secretaría de Comercio Interior de la provincia, dependencia con la que también mantuvieron reuniones, pero tras unos meses no hubo avances.
Además, presentaron la problemática al Concejo Municipal, entre otros proyectos que tienen como fin impulsar la industria heladera en Rosario.
Ciro Cacciabue, presidente de la Cicha y titular de Bajo Cero, comentó a Conclusión: «Tiene que haber una legislación que proteja al que produce, estamos totalmente desprotegidos; no hubo reducción en EPE ni ingresos brutos».
«En Santa Fe lo hicieron con los gastronómicos y se bajó la comisión al 18%. En Ciudad de Buenos Aires también llegaron a un arreglo», detalló el referente de las heladerías.
Según explica Cacciabué, hace siete años, cuando las aplicaciones entraron a la ciudad, las comisiones rondaban entre el 12 y el 15 por ciento. Y si el comercio aportaba sus propios cadetes eran del 7 u 8%.
Sin embargo, los costos se elevaron abruptamente, en plena pandemia llegaron al 32% más IVA, y actualmente se mantienen en el 25% más el impuesto, lo que termina representando un treinta por ciento del precio que abona el consumidor. «En esa posición dominante, abusiva, no tuvieron reparos en aumentar las comisiones en un más de cien por ciento», añadió Cacciabué. Además, el costo de envíos que figura en el app queda para esa empresa.
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Por todo esto, la propuesta de la cámara de heladeros es regresar a las comisiones del 12 o 15 por ciento. «Hoy se nos hace muy difícil vender bajo esa modalidad. Uno no puede trasladarlo al público porque tampoco podemos aumentar los precios», detalló el representante del sector.
Situación acuciante
A los altos costos de las comisiones se suma un descenso en las ventas, producto de la menor circulación de personas debido a la pandemia y la difícil situación económica que se vive en el país. Todo esto genera una situación crítica, por lo que la reducción de las comisiones podría significar un alivio para las empresas rosarinas, en su mayoría pymes, que apuestan al sector.
En relación a la temporada de verano pasada las ventas cayeron un 60%. De ese total, el 80% de las ventas se produce a través de pedido a domicilio, por lo que las aplicaciones representan la vía por la que se concretan casi la totalidad de esos pedidos.
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«Estamos en una situación de crisis. La venta de mostrador ha bajado por temor al contagio, inseguridad, la gente mayor no sale y las condiciones económicas están más deterioradas que el año pasado».
Por otro lado, «nuestros insumos son commodities, por lo tanto tienen valor dólar. Y eso no lo podemos trasladar al público«, refirió Cacciabué, quien comentó que «hemos hecho un gran esfuerzo junto al sindicato, que nos ha acompañado para tratar de mantener las fuentes de trabajo».
Idea de Fiesta Nacional
Para impulsar el sector la Cámara de heladeros motoriza varias propuestas en la ciudad. En ese contexto, además de la solicitud de baja del valor de las comisiones, llevó al Concejo Municipal un pedido para que la campaña que designa a Rosario como capital del helado artesanal sea declarada de Interés Municipal, así como la propia Fiesta del Helado Artesanal.
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Desde la Cámara también propusieron que este evento sea instituido como Fiesta Nacional e incluido en el calendario de las fiestas a lo largo del país. Estas iniciativas fueron aprobadas el pasado jueves en el cuerpo legislativo local.
«Rosario es reconocida a nivel internacional, tenemos consulta de otros países. Cuando hay que pedir un postre todos elegimos el helado porque tenemos el mejor del país«, cerró Cacciabué.
