El Banco Central perdió US$ 1.900 millones en reservas durante marzo y acumula la salida de US$ 3.000 millones en el año. Paralelamente, el sector agroindustrial liquidó apenas US$ 1.228,6 millones en el tercer mes del año, como consecuencia del impacto de la sequía sobre la cosecha de soja, según informaron la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC).

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) aceleró en marzo su debilidad contable de reservas ante la constante demanda por parte del mercado, en momentos en que una dura sequía golpea los ingresos del sector agrícola del país. El último día de marzo, la entidad monetaria se desprendió de unos 99 millones de dólares.

El ministro de Economía, Sergio Massa, adelantó en Washington que se prepara un plan para fortalecer sus alicaídas reservas con un tipo de cambio especial para las exportaciones agropecuarias y las economías regionales a partir de abril, por lo que se esperan detalles al respecto.

Más allá de que se extiende a diario el drenaje de divisas, y ello acentúa las preocupaciones sobre las alicaídas reservas netas, despierta entre los operadores expectativa la llegada del “dólar soja 3” ya que podría ofrecer un respiro a la dinámica de las reservas.

El peso mayorista se depreció un 0,20%, a 208,99/209,01 por dólar con la permanente regulación de liquidez impuesta desde el BCRA, quien controla un rígido cepo cambiario en danza y la restricción sobre las importaciones. La moneda perdió un 5,67% en marzo.

El BCRA cerró el mes con fuerte sangría de dólares y el mercado espera un abril muy exigente.

La alta inflación, el elevado déficit fiscal y el aumento de la pobreza son temas candentes entre los inversores, situación que se conjuga con las dudas que provoca un año electoral.

Liquidación de exportaciones, al límite

Las liquidaciones del sector agroindustrial en el mes de marzo no ayudaron a abastecer de reservas las arcas del BCRA: según la Cámara de la Industria Aceitera (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), en el tercer mes del año se liquidaron US$ 1.228,6 millones, siendo el segundo marzo más bajo desde 2020, aunque un 90% mayor que en febrero de 2023.

En el primer trimestre se liquidaron US$ 2.802 millones. “El ingreso de divisas de marzo es el reflejo de un mercado fuertemente afectado por la extrema sequía que ha reducido drásticamente las producciones, y que ha llevado a los puertos y plantas de molienda a operar con niveles extremadamente altos de capacidad ociosa (los más altos de la historia)”, indicaron ambas cámaras.

El ingreso mensual de divisas, transformadas en pesos, es el mecanismo que permite seguir comprando granos a los productores al mejor precio posible.

La liquidación de divisas está fundamentalmente relacionada con la compra de granos que luego serán exportados, ya sea en su mismo estado o como productos procesados, luego de una transformación industrial.

La mayor parte del ingreso de divisas en este sector se produce con bastante antelación a la exportación, anticipación que ronda los 30 días en el caso de granos y alcanza hasta los 90 días en el de aceites y harinas proteicas.

Esa anticipación depende también del momento de la campaña y del grano de que se trate, por lo que no existen retrasos en la liquidación de divisas.

El complejo oleaginoso-cerealero, incluyendo al biodiésel y sus derivados, aportó el año pasado el 48 % del total de las exportaciones de la Argentina, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos.

El principal producto de exportación del país es la harina de soja (14,2% del total), que es un subproducto industrializado generado por este complejo agroindustrial, que tiene actualmente una elevada capacidad ociosa cercana al 50%.

El segundo producto más exportado el año pasado, de acuerdo con el INDEC, fue el maíz (11%) y el tercero fue el aceite de soja (6,9%).