El equipo de Género encabezado por la edila Norma López presentó un relevamiento que detalla en números la cantidad de femicidios que hubo en Argentina en lo que va del año. De dicho informe se desprenden además, datos alarmantes sobre la edad de las víctimas, la manera de morir y la relación de las mujeres con el asesino.

De enero a agosto de 2019 hubo 219 femicidios en Argentina, 34 de ellos fueron en Santa Fe .

El 46,67% de los femicidios se cometieron en el domicilio de la víctima

En diálogo con Conclusión la edila resaltó: «En lo que va del año tenemos 219 femicidios nacionales y 34 de la provincia de Santa Fe. El año pasado cerramos con 38, o sea que el aumento de la violencia machista sobre las mujeres es muchísima y tenido en cuenta en el marco del contexto de criminalidad es decir en aquellos lugares donde el Estado no ha procurado la protección de las mujeres».

El 63,34% de las mujeres asesinadas en la provincia de Santa Fe, tenía menos de 34 años

De los 219 femicidios, 77 de las víctimas habían realizado denuncias previas y 36 de las mujeres asesinadas habían reiterado dichas denuncias

«De 30 femicidios en la provincia de Santa Fe que tenemos hasta finales de agosto, es decir en los primeros ocho meses, casi la mitad es por el uso de armas de fuego; por ende, nosotros venimos dando cuenta de esta situación en el marco de la ilegalidad y el contrabando de las armas de fuego y además de que evidentemente fue un fracaso de las políticas públicas en materia de seguridad para el cuidado de las mujeres y quiero comprarlo en ese sentido con las políticas de salud que lleva adelante la provincia de Santa Fe porque de las cinco mujeres muertas por abortos clandestinos en el país, ninguno cedió nuestra provincia; es decir que, cuando hay una predisposición y una decisión política hay posibilidades del cuidado de la vida de las mujeres», manifestó López.

Al ser consultada por las políticas públicas que deberían aplicarse, la concejala dijo: «Las políticas adecuadas tienen que ver con materia de seguridad; por ejemplo, lo que ha significado la distribución y el uso y el control de las pulseras electrónicas también ha sido un fracaso. Tiene que ver con la relación que tiene las investigaciones del Ministerio Público de la Acusación con lo que significa las políticas del Ministerio de Seguridad».

«Una sugerencia y propuesta que vamos a hacer a lo que es la medicina forense es resaltar que los cuerpos de las mujeres hablan y muchas veces no son tenidas en cuenta las denuncias previas que han tenido la mayoría de las mujeres. No se investiga desde una perspectiva de género; los cuerpos de las mujeres muertas no avanzan en investigaciones y esto genera mayor impunidad», finalizó.