Tras meses de expectativas, anuncios y especulaciones, la cumbre del G20 tuvo su edición argentina. Y luego de arduas negociaciones, se logró consensuar, con un trasfondo de profundas divisiones,  un documento final titulado «Construyendo consenso para un desarrollo sostenible».

Los dirigentes de los 20 países más ricos mostraron sus grandes diferencias durante la cumbre que mantuvieron hasta este sábado en Argentina. Reunidos durante dos días en Buenos Aires, los líderes del G20 llegaron a un consenso mínimo en dos de los temas más sensibles: el comercio y el clima.

El comercio internacional y las inversiones fueron considerados por los líderes como los pilares del «crecimiento, productividad, innovación, creación de empleo y desarrollo».

Por ello, reconocieron «la contribución que el sistema de comercio multilateral» en esos aspectos pero indicaron que el actual sistema tiene algunas fallas y puede ser mejorado.

El G20 aseguró que la Organización Mundial de Comercio no cumple con sus objetivos, por lo que indicó que debería ser reformada; este tema será tratado en la próxima cumbre, que se celebrará en Japón en 2019.

 

Infografía G 20

Medio Ambiente: comprometidos con el Acuerdo de París, sin Estados Unidos

Los firmantes del Acuerdo de París insistieron en que el pacto es «irreversible» y garantizaron que se comprometen a implementarlo en su totalidad al asumir «responsabilidades comunes pero diferenciadas y capacidades respectivas de acuerdo con las circunstancias nacionales».

Por su parte, Estados Unidos, reiteró su decisión de abandonar el acuerdo y señaló su intención de alcanzar usar todas las tecnologías y las fuentes de energía para proteger el medio ambiente mientras se garantiza el desarrollo económico, el acceso energéticoy la seguridad.

Los líderes hicieron énfasis en el papel cruciar de la energía para moldear el futuro y alentaron las transiciones energéticas que combinen desarrollo y reducción de las emisiones de efecto invernadero.

«Reconocemos oportunidades de innovación, crecimiento y creación de empleo mediante inversiones mayores en fuentes de energías renovables, tecnologías e infraestructura», aseguraron.

Tecnologías, futuro del trabajo y acceso a la educación

Los líderes de las potencias  indicaron que adoptarán «tecnologías transformadoras» con el fin de crear nuevas oportunidades económicas y mejores trabajos y condiciones de vida e hicieron énfasis en los desafíos que enfrentarán los individuos, las empresas y los gobiernos.

Por ello, resaltaron que la cooperación internacional será clave para que los beneficios de la tecnología puedan ser aprovechados por un mayor número de personas.

Los líderes reiteraron su compromiso con un trabajo decente, inclusivo, justo y sostenible. Por eso, hicieron hincapié en la necesidad de mejorar las condiciones laborales en todas las formas de empleo, concentrándose en promover el trabajo formal y creando sistemas de protección social fuertes y adecuados.

Acordaron tomar acciones puntuales para acabar con el trabajo forzado, el trabajo infantil, el tráfico de personas y la esclavitud moderna.

De igual forma, recalcaron la importancia del acceso a la educación como derecho humano y como estrategia fundamental de desarrollo para crear sociedades «más inclusivas, prósperas y pacíficas». También afirmaron que promoverán, de forma coordinada, políticas de empleo y educación de calidad.

Equidad de género, inclusión y migración

Otro tema abordado que resaltaron los mandatarios  fue la equidad de género. Los países continuarán trabajando para reducir la brecha de género en la fuerza laboral a 25 % en 2025 y pactaron promover iniciativas con el fin de acabar con todas las formas de discriminación hacia las niñas y las mujeres.

“Nos comprometemos a promover el empoderamiento económico femenino, incluido el trabajo en el sector privado, y mejorar las condiciones laborales para todos”, aseveraron.

Al mismo tiempo, se refirieron a la inclusión como fundamento del desarrollo global y lanzaron la ‘Guía de Políticas de Inclusión Financiera del G20’, “que provee recomendaciones voluntarias para facilitar los servicios financieros digitales, tomando en cuenta los contextos de los países”.

Los presidentes indicaron que continuarán discutiendo medidas para enfrentar las crisis migratorias que vive el mundo.

Los grandes movimientos de refugiados son una preocupación global con consecuencias humanitarias, sociales, políticas y económicas. «Enfatizamos en la importancia de actuar conjuntamente para identificar las causas del desplazamiento y responder a las crecientes necesidades humanitarias», reza el documento consensuado por los líderes del mundo.