El Departamento de Comercio de Estados Unidos decidió este martes aplicar una tasa adicional de casi 14 puntos a las importaciones de biodiésel desde la Argentina, por considerar que la producción está «subsidiada».

Según informó el Departamento de Co0mercio de Estados Unidos al emitir la Comisión Nacional de Biodiésel un comunicado, se impondrían aranceles compensatorios que irían desde un 50,29% a un 64,17% para el caso de Argentina.

El biodiésel, producido a partir de materia prima vegetal, animal o mezcla de ambos, es generado también por unos 30 estados norteamericanos que hoy estarían en desventaja.

El Departamento de Comercio de los Estados Unidos había postergado por dos meses una definición sobre el posible dumping argentino del biodiésel, en una decisión que se conoció durante la visita del vicepresidente de los Estados Unidos, Mike Pence, al país.

La Argentina llegó al cuarto puesto como productor mundial de biodiésel durante el 2016, con 2,25 millones de toneladas.

Repercusiones

La Cámara de Biocombustibles de la Argentina (Carbio) calificó de «injustificada» la decisión del Gobierno de los Estados Unidos de elevar aranceles al ingreso de biodiésel y advirtió que esta medida «paralizará en forma inmediata» las ventas a ese mercado, que llegaron a 1.100 millones de dólares en 2016, y además que “perjudicará a toda la cadena sojera argentina”

Los empresarios rechazaron la resolución de la Secretaría de Comercio de Estados Unidos que impuso elevados derechos compensatorios provisorios por presuntos subsidios locales, a los que la entidad empresaria calificó de «inexistentes».

«Nuestro biodiésel es el más competitivo del mundo, sin subsidios ni prácticas distorsivas, por lo que lamentamos los problemas al transporte norteamericano que esta medida generará, pues en adelante deberá pagar más caro el biodiésel al haber eliminado la competencia», señaló el presidente de Carbio, Luis Zubizarreta.

En este sentido, Zubizarreta manifestó que «es llamativo que, luego de la visita del vicepresidente de Estados Unidos, donde expresó la voluntad de incrementar el comercio bilateral, nos llegue esta noticia tan negativa».

Relaciones carnales

El presidente de la Asociación de Productores Porcinos bonaerense (Aproporba), Alejandro Lammachia, cuestionó la decisión de ingresar carne de cerdo desde los Estados Unidos al entender que la calidad del producto local es «de excelencia».

«El estatus sanitario en Argentina es de excelencia», dijo el productor e indicó que el cerdo estadounidense «tiene una enfermedad respiratoria reproductiva que puede comprometer los estándares de calidad nacionales».

La administración de Mauricio Macri decidió habilitar la importación de carne de cerdo desde los Estados Unidos después de la visita del vicepresidente de ese país, Michael Pence, a la Argentina días atrás.

El Gobierno dijo que decidió abrir el mercado para «fortalecer los lazos comerciales», pero los productores se quejan porque con el mismo argumento en 2016 abrió la importación desde países como Brasil, Dinamarca y Canadá.

«Se da una competencia desleal porque mientras se abre la importación, la industria local se deteriora al tener que afrontar una fuerte presión fiscal y el constante aumento en el precio de los insumos», protestó Lammachia.

Asimismo, señaló que el primer semestre de este año la importación de carne de cerdo «aumentó un 80%» en comparación con el mismo periodo el año pasado, y que eso significa un golpe muy duro para la industria local, sobre todo en la provincia de Buenos Aires, «donde se faena el 60% de la producción nacional».