Conclusión Buenos Aires

El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, calificó de «vergonzosos» y «obscenos» los gestos y actitudes de dirigentes de Juntos por el Cambio durante la frustrada sesión de este jueves en la Cámara de Diputados de la Nación.

La sesión terminó en medio de un clima tenso que se había originado a partir de la imposiblidad de elegir a las autoridades del cuerpo y el titular del bloque PRO, Cristian Ritondo, fue cuestionado por hacer gestos «vulgares», «misóginos» y cargados de violencia contra la mujer.

Los señalamientos al legislador fueron el epílogo de una jornada tumultuosa en la Cámara baja, en la que la bancada oficialista no pudo conseguir que se aprobaran los proyectos que habían sido incluidos en el temario de la convocatoria.

«Que los vergonzosos gritos, los gestos obscenos y la violencia de la oposición en el Congreso no nos impidan ver también el fondo. La sesión que interrumpieron estaba destinada a crear nuevas universidades en la provincia», expresó Kicillof en su cuenta de Twitter.

«Es decir, lo que frenaron no fue una sesión parlamentaria, lo que frenaron es el derecho a la formación universitaria de miles de bonaerenses», aseveró el mandatario bonaerense.

En ese marco, recordó que, «cuando fueron gobierno, (desde Juntos por el Cambio) protestaban porque sobraban universidades en el conurbano», y sostuvo que «ahora se oponen a que, por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires existan Universidades Nacionales en Pilar, Ezeiza, el Delta y Salliqueló».

«Se nota mucho y queda muy a la vista lo que tenemos que decidir como pueblo: derecha o derechos», concluyó en su posteo el gobernador.

Germán Martínez: «Hubo volencia y descalificación

El jefe de la bancada del Frente de Todos (FdT) en la Cámara de Diputados, Germán Martínez, denunció que Juntos por el Cambio “rompió el clima” que había en la Cámara de Diputados “con gestos y actitudes sumamente violentas”.

«Juntos por el Cambio rompió el clima que veníamos teniendo en la Cámara de Diputados con gestos y actitudes sumamente violentas», señaló Martínez, en las que consideró que “fue vergonzoso lo que hizo Juntos por el Cambio”.

“Hubo una clara oposición a que podamos tener la sesión propuesta. Fue un escándalo, con gestos y actitudes sumamente violentas. Se rompió todo en la Cámara de Diputados donde claramente hubo una acción de violencia y descalificación hacia la presidenta Cecilia Moreau”, agregó.

Martínez afirmó que en la Cámara Baja “existe un reglamento para aplicar frente a estas situaciones”, pero advirtió que es muy difícil de que se avance debido a que “se necesitan mayorías y minorías para poder hacerlo” y en la actualidad hay una paridad entre los bloques mayoritarios. “Nosotros no convalidamos nada de lo que sucedió ayer, siempre que pasó algo, lo hemos denunciado”, dijo el titular del bloque FDT.

Sobre la posibilidad de sanciones para los diputados opositores que protagonizado estos hechos, Martínez consideró que “quizás no todos los bloques están dispuestos a avanzar en el repudio respecto a lo que paso ayer en Diputados”.

“Tenemos que construir puentes de dialogo en Argentina para avanzar, no hay otra manera”, concluyó.

«Una actitud violenta, antidemocrática y golpista»

La diputada Blanca Osuna (Frente de Todos) consideró «extremadamente violenta, antidemocrática y golpista» la actitud de los legisladores de Juntos por el Cambio (JxC) durante la sesión que fracasó este jueves en la Cámara de Diputados.

«La oposición tuvo una actitud extremadamente violenta, antidemocrática y golpista. Es una muestra dramática de la situación en la que están envueltos y a la que nos quieren arrastrar. No solo al oficialismo en la Cámara, sino al país», afirmó la legisladora en declaraciones a El Destape Radio.

«Lo de ayer no tiene antecedentes. Tengo varios años de actividad parlamentaria y nunca he participado en una sesión especial donde no se acompañe la designación de autoridades. Lo que se vivió fue una situación de extrema gravedad», opinó Osuna.

La diputada explicó que iban a realizarse dos sesiones: una para la designación de autoridades -que fracasó ya que no dieron quórum JxC, el Interbloque Federal y la izquierda- y una sesión especial que contemplaba la creación de universidades, en la que se logró el quórum «con el acompañamiento de otros bloques minoritarios».

«Fue ahí cuando los legisladores de JxC entraron en avalancha para impedir que la sesión se lleve a cabo», indicó.

Además, la legisladora consideró que «es una locura» que un gentilicio sea utilizado como agresión en referencia a las palabras expresadas por el diputado Cristian Ritondo que le gritó ‘venezolana’ a la presidenta de la Cámara con intención de agraviarla.

«Rompieron los equipos de computación que la Cámara dispone. Si se destruye un bien material con un valor económico concreto, el particular que ha dañado eso tiene que resarcirlo y eso seguirá su vía administrativa», apuntó y agregó que además «tiene un valor simbólico dañar bienes del Estado y agredir a los representantes de comunidades concretas».

FUNCIONARIOS Y DIRIGENTES DEL FRENTE DE TODOS RESPALDARON A CECILIA MOREAU

«La misoginia y el machismo estallaron en el Congreso. Toda nuestra solidaridad con la presidenta @ceciliamoreauok», publicó e las últimas horas en su cuenta de Twitter la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti.

Por su parte, la ministra de Mujeres, Género y Diversidad, Ayelén Mazzina, remarcó que, «una vez más, la misoginia y la violencia machista se presenta ante la falta de argumentos políticos», también expresó su solidaridad con Moreau y señaló que «en democracia solo es posible construir desde el debate de ideas, no vamos a permitir que quieran callarnos con gritos y amenazas, nunca más!».

Entre los repudios, el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Santiago Maggiotti, manifestó en su cuenta de Twitter: «Las agresiones que recibió ayer Cecilia Moreau son inadmisibles. El momento histórico nos pide unión a los argentinos y las argentinas» y añadió: «Compañera, estamos con vos para seguir construyendo un Congreso que exprese al país con federalismo, respeto y pluralidad».

También su sumó a los repudios el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza: «Repudiamos la violencia de diputados macristas en Diputados mientras abandonaban el recinto y dejaban sin quórum el tratamiento de creación de nuevas universidades nacionales. Toda nuestra solidaridad con su presidenta @ceciliamoreauok. La intolerancia daña nuestra democracia».

La intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, también repudió «la violencia con la que dirigentes macristas se manifestaron en la Cámara de Diputados» y expresó su solidaridad con Moreau. «Se la hacen peor por ser mujer, los violentos no pueden tener más lugar en la vida democrática», dijo Mendoza.

Del mismo modo, organizaciones sociales y sindicales expresaron en un comunicado titulado ‘Basta de violencia política’ su «repudio a los ataques antidemocráticos violentos y misóginos de representantes de Juntos por el Cambio contra las legisladoras y dirigentes del Frente de Todos».

En el texto se agrega en que «la ley de protección integral de las mujeres expresa que hechos como el que este jueves provocaron esos diputados en el recinto constituyen violencia política por razón de género y les corresponde tanto la sanción judicial como el repudio ciudadano».

Firman el texto la Confederación General del Trabajo (CGT), la CTA, la CTA Autónoma, la UTEP, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el Sipreba, Mujeres Sindicalistas, y la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo.

Un final escandaloso

La sesión, que se inició a las 14.35, fue levantada a las 15.40 debido a que el cuerpo quedó sin número suficiente cuando el diputado Maximiliano Ferraro, de la Coalición Cívica-JxC, pidió votar la suspensión, en el momento en que se registraba la ausencia de cinco diputados del Interbloque Federal que inicialmente colaboraron para habilitar el debate.

El clima tenso fue consecuencia de la controversia planteada cuando fracasó la sesión preparatoria, al mediodía, ya que no dieron quórum JxC, el Interbloque Federal y la izquierda y no se pudieron elegir las autoridades del cuerpo, al objetar la decisión de la presidenta de la cámara, Cecilia Moreau, formalizada el miércoles, de dejar sin efecto la nómina de legisladores designados para integrar el Consejo de la Magistratura en representación de la Cámara baja.

En tanto, diputados nacionales del Frente de Todos repudiaron un gesto grosero realizado por el titular del bloque PRO, Cristian Ritondo, al finalizar la sesión y consideraron que su ademán fue una acción «vulgar», «misógina» y cargada de violencia contra la mujer.

Los cuestionamientos al legislador del PRO fueron el epílogo de una jornada tumultuosa en la Cámara baja, en la que la bancada oficialista no pudo conseguir que se aprobaran los proyectos que habían sido incluidos en el temario de la convocatoria.

Cuando la sesión había concluido y mientras se acercaba a la salida del recinto, Ritondo alzó ambas manos e introdujo el dedo índice de una mano en un círculo formado por los dedos índices y pulgar de la mano contraria; su gesto duró un instante, porque rápidamente unió las palmas, como si se despidiera de los oficialistas.