El ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Marcos Corach, analizó este miércoles el ataque a balazos que sufrieron los Tribunales Federales de Oroño y San Luis y aseguró que fue una respuesta de las bandas criminales a los últimos allanamientos ordenados en el territorio provincial.

«Es un amedrentamiento por parte de sicarios y bandas a la Justicia Federal, al gobierno y a la actuación de la policía», afirmó el funcionario provincial en referencia a la balacera que sufrió este miércoles el edificio de los Tribunales Federales de Rosario.

Para Corach, el ataque fue una respuesta a los últimos allanamientos que se produjeron en la provincia, donde -según manifestó- la Justicia y la Policía de Santa Fe adoptaron un rol más activo, sobre todo -insistió- desde el arribo de Rubén Rimoldi a la cartera de seguridad.

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«Esto es reactivo. Si la policía hoy está actuando y haciendo allanamientos; secuestrando armas, la devolución es esta», destacó el titular del Ministerio de Gestión Pública.

Y enfatizó: «Claramente es un ataque extorsivo; reactivo al accionar de la policía y parte de la Justicia, que ordena los allanamientos. Cuando la Justicia ordena allanamientos, la reacción viene de esta manera».

Pasadas las 3 de la mañana, un sujeto, solo y armado se acercó a los Tribunales Federal ubicados en Oroño 940 y abrió fuego. El disparo impactó sobre la garita de seguridad del edificio que, en ese momento, se encontraba vacía.

LOS AUDIOS DE SAIN

El ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Marcos Corach, también habló este miércoles de los audios filtrados del extitular del Ministerio de Seguridad provincial, Marcelo Sain, y aseguró que parte de la oposición utiliza el material «para sacar partido» políticamente. En ese marco, indicó que «llama la atención» la velocidad con la que los archivos aparecieron en poder de los medios de comunicación y señaló que el proceso judicial en torno a estos hechos es «un poco raro», porque «pasaron dos años y no hay ningún imputado».

El funcionario provincial contó que, como querellantes en la causa que investiga un supuesto espionaje ilegal en la órbita del Ministerio de Seguridad de Santa Fe, tuvieron acceso a las escuchas recién el pasado viernes. Aun así, durante el fin de semana, los audios aparecieron editados y publicados en distintos medios de comunicación, una situación que en el Ejecutivo asocian a una intención de sacar rédito político de las filtraciones.

«Hemos recibido las escuchas recién el viernes. Me parece que en la política están tratando de jugar con esto, buscan sacar partido. Lo que pasa no es razonable, ninguna de las cosas que se están escuchando (de parte de la oposición) son pertinentes con la causa. La causa es por las escuchas ilegales, pero uno escucha y ve que lo que sale no tiene nada que ver con eso», planteó Corach este miércoles.

Al momento de hacer foco en la manera en la que se difundieron los audios, el funcionario provincial dijo que el material debe haber llegado a todos los querellantes de la misma manera en la que lo recibió la Provincia. «Nosotros recibimos las escuchas el viernes y resulta que el fin de semana ya empezaron a ser distribuidas y editadas, claramente la política juega», lamentó.

Posteriormente, al centrarse en el contenido de los audios filtrados, el ministro de Gestión Pública ratificó que no existe ni existió ninguna orden del gobernador Omar Perotti ni de sus funcionarios para que se realicen investigaciones que no estén relacionadas a causas judiciales.

«De hecho, si a metros del despacho del gobernador se hizo un allanamiento, es porque claramente dejamos actuar a la Justicia y en ningún momento intentamos inmiscuirnos, mucho menos con investigaciones que no tengan que ver con causas judiciales. No nos metemos en eso», afirmó.

«Los audios se distribuyen a los querellantes. El hecho de que después los medios de comunicación tengan acceso a los audios, ya no depende de nosotros. Claramente hay una intencionalidad y se nota, es manifiesta. Se nota en las manifestaciones de los dirigentes y en las de los legisladores. En un momento en el que además se están concursando los fiscales del Ministerio Público de la Acusación. No soy ingenuo, déjenme dudar sobre cómo se ha distribuido. Además, que hayan pasado dos años y que la causa no tenga ningún imputado es un poco raro», concluyó.