El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, calificó esta mañana de «anacrónico» el planteo del arzobispo tucumano, monseñor Alfredo Zecca, contra las normas que avalan el aborto no punible y la fertilización asistida y acusó al prelado de «pretender ponerle cosas en la cabeza a los otros».

«No coincidimos en nada», advirtió Fernández, al ser consultado sobre la posición de Zecca, quien además se quejó de que el prelado no «piensa por toda la iglesia».

En declaraciones formuladas en la Casa de Gobierno, el funcionario se preguntó «por qué no piensa un poquito ese arzobispo las cosas que está diciendo el Papa (Francisco) en Latinoamérica» con una «posición durísima contra el orden económico mundial».

«El arzobispo pretende que su visión sea la de la Iglesia. Es la de un arzobispo, no es la iglesia, yo también soy la iglesia y no estoy de acuerdo con lo que piensa él», subrayó.

Zecca había advertido ayer «de qué pluralismo y democracia se habla, cuando se convierte automáticamente en enemigo al que con todo derecho discrepa».

El purpurado también destacó que «se está intentando imponer protocolos de aborto y de fertilización asistida absolutamente inaceptables porque violan el elemental derecho a la vida y a seguir la propia conciencia».

Al respecto, Fernández indicó que Zecca habló de un «ataque a la iglesia» y una falta de respeto al «pluralismo» por las normas y fallos judiciales que respaldan el aborto no punible y la fertilización asistida.
Y subrayó que «hace lo mismo que ataca» porque, según dijo, el purpurado convierte en «enemigos» a quienes discrepan con él en esos temas.

Fernández calificó de «impecable» el fallo de la Corte Suprema que extendió a todas las mujeres embarazadas producto de una violación el derecho a practicar un aborto no punible.

Y destacó que en cuanto a la ley de fertilización asistida, la votó favorablemente como legislador y lo «volvería a hacer», tras destacar que la norma fue respaldada por entidades nacionales e internacionales.

Se quejó de que Zecca pretende que «todos» piensen «como él» y señaló que el país le da la posibilidad de desarrollarse a «evangelistas, judíos, musulmanes» y a «todos los hombres del mundo».

Fernández acusó además al prelado de «hacer lo mismo que está denunciando» por rechazar las ideas de «quienes no piensan como él».

«El arzobispo de Tucumán pretende ponerle cosas en la cabeza a los otros y dice cosas como que los legisladores deberían oponerse» al aborto no punible y la fertilización asistida, subrayó.