Este miércoles, comenzó el debate del nuevo cuerpo de normas que regirá el comportamiento de los ciudadanos rosarinos en los próximos años. El proyecto elevado por el Ejecutivo Municipal pretende actualizar el código de faltas, unificar muchas normativas que se fueron superponiendo y actualizar un código que «ya está muy obsoleto».

«Hace varios años que se da un proceso de discusión porque es necesario actualizar un código que está muy obsoleto», señaló María Eugenia Schmuck, presidenta del Concejo Municipal. «Esta ciudad ha cambiado mucho sus prácticas y es necesario debatir un nuevo código que haga más eje en la dignidad humana y menos en la moral y las buenas costumbres, como el viejo código de faltas».

Schmuck destacó que todos los concejales y concejalas han manifestado su voluntad de que «el código sea aprobado por unanimidad, al menos en general y «en todo caso discutir en particular los distintos temas en los que pueda haber diferentes posturas».

Además, la funcionaria aseguró que se busca darle una dinámica tal que les permita tener el tema resuelto en no más de dos meses. «Sería muy interesante que esto estuviera, discutido, debatido y aprobado antes de las vacaciones de julio, si es que hay vacaciones».

Por su parte, el Secretario de Gobierno de la Municipalidad de Rosario, Gustavo Zignago señaló que se trata de una posibilidad de trabajo concreta que parte del interés en discutir un elemento tan trascendental para la vida de los rosarinos y rosarinas.

«Esta es una circunstancia que la ciudad se debía, esta iniciativa del Ejecutivo contempla la labor legislativa del cuerpo que está en ejercicio, no se olviden que todas las modificiaciones y ordenanzas impactan sobre el código. Esta iniciativa ha incorporado la labor legislativa del actual concejo