Funcionarios de la fiscalía concurrieron en horas de la mañana a una de las torres del complejo Le Parc, en Puerto Madero, de donde se llevaron el módem que proveía de servicio de Internet al departamento en el que vivía Nisman, donde fue hallado muerto el pasado 18 de enero.

El procedimiento lo llevó adelante el secretario letrado Bernardo Chirichella, quien ingresó al departamento provisto por un juego de llaves que le facilitó la madre de Nisman, Sara Garfunkel, y así se hizo del aparato en cuestión.

El estudio del módem es clave, pues en él quedan registros de todo el tráfico en Internet por parte de los dispositivos utilizados en el departamento de Nisman, tanto de su PC como de su teléfono.
Ahora, se prevé que expertos de ciber crimen de la Policía Metropolitana en conjunto con peritos de parte realicen un estudio del módem que contiene información sobre el tráfico en Internet, para averiguar cuáles fueron los últimos movimientos de Nisman en la web.

A la vez, la fiscal Fein luego de recibir el informe de autopsia y de la junta criminalística, aguarda el peritaje tecnológico sobre la computadoras y teléfonos de Nisman, para resolver sobre si pudo tratarse de un suicidio o bien un homicidio.

El secuestro del módem de la casa del exfiscal se produjo a poco de que se cumplan seis meses de su muerte, el 18 de enero pasado.
Días atrás, la Justicia descubrió que la computadora portátil del fallecido fiscal estaba infectada por un virus que no permite la intromisión o el daño de archivos.

Ese equipo había generado polémica por la supuesta intromisión de una persona tras la hora de muerte de Nisman, algo que finalmente no se pudo comprobar.