El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, destacó hoy el «nuevo enfoque» que tendrá la Inteligencia, a partir de la iniciativa de creación de una Agencia Federal anunciada por la Presidenta, y evitó decir cuál será el destino de los espías tras la disolución de la exSide.

Capitanich se expresó de este modo en referencia a la iniciativa que será girada al Congreso, tal como lo anunció Cristina Kirchner por cadena nacional, a partir de la muerte del fiscal Alberto Nisman a cargo de la investigación del atentado a la Amia.

El funcionario detalló que la iniciativa que se giró a la Secretaría Legal y Técnica, según indicó la Jefa de Estado para ultimar detalles, prevé que la Agencia Federal de Inteligencia estará a cargo de un director y subdirector, que serán designados con  acuerdo del Senado, y tendrán un mandato de 4 años.

En su habitual conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, el Jefe de Gabinete se refirió al discurso de anoche, de la mandataria quién anunció «la decisión política» de eliminar la Secretaría de Inteligencia (SI) y la perspectiva de creación de la nueva Agencia Federal de Inteligencia, que «implica un nuevo enfoque desde el punto de vista de la inteligencia, de su organización».

Al ser consultado sobre el destino que tendrán los empleados de la exSide, Capitanich se limitó a decir que el personal de la nueva Agencia «será motivo de la nueva constitución orgánica» donde se incluirán «los procesos de selección de personal conforme  al perfil que adquirirá la Agencia».

Al justificar la iniciativa, Capitanich sostuvo que «hay un conjunto de circunstancias que determinan la ponderación política para tomar una decisión trascendente», que calificó como una «decisión estratégica», tras asegurar que «es una deuda de la democracia como lo dijo anoche la Presidenta».

Entre los múltiples aspectos de la iniciativa que será girada al Parlamento para su tratamiento en sesiones extraordinarias que serán convocadas a partir del 1 de febrero, Capitanich dio algunas precisiones de la iniciativa.

En ese sentido, mencionó: «la designación de un director y un Subdirector con acuerdo del Senado; la fusión de la inteligencia criminal en materia del ministerio de seguridad pública en esta Agencia de Inteligencia; los agentes de inteligencia tendrán por objeto colectar la información calificada para el combate al narcotráfico, el terrorismo internacional, la trata de personas y una multiplicidad de delitos complejos, como el sistema de la ciber seguridad, para generar condiciones de protección para los habitantes de la Argentina».

Además, ratificó que «existe la decisión política, que es estratégica, respecto de garantizar que las escuchas telefónicas no corresponden al ámbito del Poder Ejecutivo sino a un  órgano extra creado por el artículo 120 de la reforma Constitucional de 1994, que no pertenece ni al Ejecutivo, ni al Judicial ni al Legislativo sino a la procuradora General de la Nación«.

Al respecto, remarcó que «se da garantía de seguridad jurídica y la utilización de escuchas para los delitos cuya complejidad requiere este sistema».

En otro pasaje de su exposición, Capitanich dijo que el de la Presidenta «ha sido un discurso minucioso, contundente, con una evaluación muy clara respecto a dos pilares de las políticas públicas a partir de 2003: una política de derechos humanos que claramente ha denunciado en forma clara, sistemática, el terrorismo de Estado que ha permitido juicio y castigo a los culpables, bajo los principios de Memoria, Verdad y Justicia».

También destacó que el otro pilar, es «la lucha contra el terrorismo internacional en virtud de los dos atentados que sufrió la Argentina, con una militancia activa como legisladora y después como Presidenta para el esclarecimiento definitivo, claro y contundente de los hechos».