El secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, aseguró hoy que van a «desplazar mucho personal de Gendarmería, Prefectura y Policía Federal» para garantizar que «aquel que sí quiere y que necesita trabajar» mañana «pueda hacerlo» pese a los piquetes anunciados en el marco del paro de la CGT.

«Nuestra idea es permitir que la gente que quiera ir a trabajar, pueda hacerlo y evitar los bloqueos. El que quiere parar o hacer valer su derecho a huelga puede hacerlo pero no por eso perjudicar a aquel que quiere trabajar», explicó Burzaco.

En declaraciones a Radio Nacional, el funcionario anticipó que, de cara a los múltiples cortes de calles que se prevén para este jueves, «se establecieron una serie de mecanismos para evitar que se corten los principales ingresos y egresos de la Ciudad».

En este sentido, el secretario de Seguridad nacional detalló que se van a «desplazar mucha gente, personal de Gendarmería, Prefectura y Policía Federal» porque entienden que «en este caso es necesario para que, no habiendo transporte público y queriendo la gente ir a trabajar en sus automóviles, lo puedan hacer».

«Si alguien quiere movilizarse, nosotros permitiremos la movilización porque es un derecho constitucional, ahora, bloquear los accesos es un delito», diferenció.

Por otra parte, Burzaco también criticó los dichos del líder del Sindicato de Peones de Taxi, Omar Viviani, quien exhortó a «dar vuelta» los vehículos de aquellos afiliados que trabajen el jueves, y denunció que se trató de un intento de «meterle miedo a la gente para que no vaya» a sus empleos.

«Hay quienes necesitan ir a trabajar, por presentismo o porque necesitan llegar a fin de mes  ¿por qué un taxista tiene que tener miedo de usar su taxi porque se lo van a dar vuelta?», cuestionó el funcionario.