El diputado nacional del bloque justicialista Diego Bossio destacó la importancia de que la oposición no kirchnerista «construya una alternativa» para Argentina de cara a las elecciones presidenciales de este año y agregó que «no hay nada más virtuoso que una PASO» para esa definición, al rechazar la idea de Roberto Lavagna de un candidato por «consenso».

«Las PASO son obligatorias, haya o no contrincantes. Eso va a generar otra seguridad entendiendo que todos sabemos que el que gana, gana, y el que pierde, acompaña», explicó.

Consultado sobre las aspiraciones del ex ministro de Economía Roberto Lavagna a la Presidencia, Bossio cuestionó la idea de definir una candidatura «por consenso», tal como lo exige el economista, y pidió discutir «sin egoísmos».

«Con profunda vocación democrática y republicana podremos construir una alternativa. Tenemos una responsabilidad con la representatividad», agregó el legislador, quien aseguró estar ubicado «mas cerca de Sergio Massa» quien también pugna por representar al espacio opositor no kirchnerista dentro de Alternativa Federal.

Y agregó: «Hay que construir una mayoría pensando en el 10 de diciembre, buscando las mejores alternativas, yo creo que no hay nada más virtuoso que una PASO».

Por otra parte, evaluó que «no hay ningún elemento que pueda cambiar la realidad ahora, ni se va a hacer más sustentable la economía en los próximos meses». Y tras criticar al actual «programa económico que ha fracasado rotundamente», señaló que el paquete de medidas que anunciaría el próximo miércoles el Gobierno nacional tendrá «poca» efectividad ya que «la Argentina necesita un plan antiinflacionario en serio».

«En el informe de revisión del Fondo (Monetario Internacional) se dice que hay problema de crecimiento de la deuda, que la inflación supera el cuatro por ciento mensual, y no pareciera que se fuera a mejorar en los próximos meses», apuntó el diputado.
Bossio remarcó además que un programa de ajuste extendido, como lo plantea el organismo internacional, sería inviable para la Argentina.

«Los programas del FMI son de hasta ocho o diez años de ajuste, y no puede funcionar en nuestro país. No estamos en condiciones de sostener esos niveles de ajuste como países de Europa del Este en los que el contexto es completamente distinto porque están rodeados de países del primer mundo», afirmó Bossio.

«Nuestro país tiene una situación social muy frágil, no soportaría jamás un ajuste constante durante diez años», concluyó.