Por Marcelo Chibotta

«Tenemos presentados cerca de mil proyectos y es importante que la gente sepa que el 50 por ciento fueron presentados por vecinos que se acercaron al Concejo con algún problema”.

Con esa frase, Aldo Pedro Poy resumió durante la entrevista con Conclusión su gestión de casi dos períodos, desde aquel diciembre de 2011 cuando aupado por el voto de los hinchas de Central logró ser concejal por el Frente Progresista.

Enfocado en cuestiones vinculadas al deporte, el ex futbolista se refirió a un proyecto de su autoría por el cual se climatizó una pileta que está dentro de las de propiedad del Estado local, que además se adaptó para personas discapacitadas “que las necesitan por cuestiones de salud”.

Más adelante, aseguró que si vuelve a ser elegido hará hincapié en las cuestiones vinculadas a “la gente con mayores problemas”.

Luego de explicar su proyecto preventivo para mejorar las condiciones del tránsito en la ciudad, se refirió a su interés sobre la creación de la secretaría de Deportes en Rosario que hoy es subsecretaría.

“Creo que hay que reactivarlos muchísimo – expuso – porque son la atracción de los chicos del barrio que prefiero estén dentro de un club, donde los más grandes les van corrigiendo los errores y los guían en como tienen que actuar en la vida”, explicó.

Sobre el final de la entrevista, y al respecto de su precandidatura a ocupar nuevamente una banca de concejal, Poy afirmó: “Me veo muy bien, creo que puedo estar segundo o tercero en la lista final porque las mediciones me dan muy bien, porque tengo mucho apoyo de la gente de Central como estuve anteriormente y estamos pensando en meter dos concejales”.

Tras ser consultado sobre la candidatura de Ariel Cozzoni, el “clásico” que sólo cuenta para el folclore futbolístico, el autor de la famosa palomita valoró a su colega deportivo: “A Ariel lo conozco y es un buen chico, ojalá que tenga suerte… pero le voy a ganar seguro”.

Finalmente, sobrevoló la disputa futbolera y razonó: “A esta altura de mi vida trato de ser lo más compañero posible de todo el mundo».