La dirigente social Milagro Sala fue trasladada este martes desde su domicilio en Jujuy para una junta médica «sin una orden judicial», en un procedimiento que fue señalado como «ilegal» por su equipo letrado, que advirtió, además, sobre la posible intención de llevarla a «una cárcel común».

En las primeras horas de la mañana, Sala, que se encuentra en prisión domiciliaria, fue traslada hasta una dependencia del Poder Judicial, pero finalmente no cumplió con la evaluación médica por la mediación de sus abogados, y retornó a su domicilio ubicado en el barrio Cuyaya de la capital jujeña.

“Hoy a las 8.30 de la mañana, la junta médica me quiso llevar a que me hagan nuevamente todos los estudios”, indicó Sala en un video, en donde también dio cuenta que en diciembre pasado ya fue revisada por una junta médica, en donde se constató el mal estado de una de sus piernas, siendo necesario una intervención quirúrgica en la Fundación Favaloro.

“Hoy vuelven a insistir con esto sin la orden del juez. No puedo salir sin una orden. El comentario de pasillo es que me quieren llevar al penal después de la junta médica. La maniobra que está realizando (el gobernador de Jujuy, Gerardo) Morales es nefasta”, agregó la dirigente social.

«No se hizo la junta médica porque no había orden de un juez, fue todo un procedimiento ilegal», explicó, por su parte, la abogada Alejandra Cejas, integrante del equipo que patrocina a Milagro Sala.

La solicitud de traslado fue realizada por el fiscal de Estado de la Provincia de Jujuy, Miguel Ángel Rivas, con el patrocinio del procurador general Luis Albesa, en base a la condena contra la dirigente jujeña a 13 años de prisión por el delito de «fraude a la administración pública, asociación ilícita y extorsión que fue confirmado por la Corte Suprema de Justicia».

En el escrito se solicita el traslado de Sala a cárcel común del Servicio Penitenciario «para el cumplimiento de la condena» y señala: «No solo existen informes médicos y psicológicos que acreditan el estado de salud de Sala, apto para ser alojada en un cárcel común, sino que además resulta de público y notorio que realiza profusa actividad política de desde su domicilio real, ergo, no existe impedimento ninguno para que se provea esta petición”.

Por su parte, la exministra Elizabeth Gómez Alcorta -que coordina la defensa de Sala- informó en su cuenta de Twitter que anoche fueron informados de esta medida y que «siempre las juntas médicas se hicieron en su casa porque es lo que sus médicos recomiendan».

«Nos informaron anoche de esta medida y no podemos contar con los médicos de Milagro para que asistan a esa junta. Hemos presentado un hábeas corpus para evitar el traslado y no se le dio trámite», indicó Gómez Alcrota, al advertir del trámite que se realizó «de forma irregular».

«Esta es la respuesta de Gerardo Morales a la dignidad de un pueblo, el feroz hostigamiento a una de sus dirigentes. El equipo de abogdxs de Milagro llama a todxs a estar alerta frente a esta situación», concluyó la dirigente y abogada.