En la madrugada de ayer y en un hecho sin precedentes, la Fiscalía General de la localidad santafesina de San Javier, dependiente del Ministerio Público de la Acusación, sufrió un violento atentado en el cual fueron quemados expedientes y computadoras y se llevaron armas de fuego que estaban en custodia como pruebas de diversas causas.

La o las personas que ingresaron al lugar -aún no se ha determinado el número- lo hicieron luego de violentar rejas y ventanas, y podría deducirse que conocían las dependencias o al menos tenían indicaciones precisas de en qué lugares se encontraba el material que buscaban destruir. Hicieron una pila con expedientes y los quemaron junto a una  computadora.

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Elementos quemados en la fiscalía de San Javier

La fiscal a cargo de la investigación, Rosana Marcolín, dijo que “se trató de una maniobra encubridora con intenciones de frenar una investigación penal. Fueron directamente donde se guardan los archivos de sumarios e hicieron una pila con los papeles. También buscaron mi computadora personal, en mi oficina. Luego, le prendieron fuego a todo. También incendiaron otras dos dependencias”.

«Fue un hecho perpetrado con mucho profesionalismo -precisó la funcionaria- no era ninguna persona improvisada. El que hizo esto ingresó por una puerta lateral. Trepó por un patio interno, cortó un enrejado que había allí con mucha precisión. Luego accedió a una ventana, la violentó y cuando ingresó rompió cerraduras de donde estaba la documentación. Con mucho esmero armó una pila con todos los sumarios y les prendió fuego».

Además, se robaron armas de fuego que estaban en un gabinete y habían sido secuestradas como pruebas de distintos hechos.

«Es imposible recuperar lo quemado. Trataremos de suplir con testimoniales. No hemos hecho un relevamiento de las causas afectadas por este incendio que fue muy grande, pero vamos a ver qué se puede rescatar», agregó Marcolín.

La fiscal sostuvo que el atentado «es de una gravedad institucional terrible. Tenemos causas penales en trámite.. Esto fue gravísimo, que se animen a realizar semejante maniobra.»

Por su parte, el fiscal general del Ministerio de la Acusación de la provincia, Julio de Olazábal, definió los hechos como “un atentado contra la democracia, contra la República”.

El funcionario, que se encuentra viajando hacia San Javier, y brindará mañana una conferencia de prensa, dijo que no hay ningún tipo de dudas, los autores fueron concretamente a destruir elementos de valor judicial; “no fue ni un acto de robo ni de vandalismo”.