Toda una ciudad conmovida busca incansablemente a Maximiliano Sosa, el niño de tan sólo 3 años que falta de su hogar desde la tarde de lunes 21 de este mes cuando se radicó la denuncia en la comisaría de la localidad santafesina de Ceres.

La búsqueda, en la que participan la Policía y los Bomberos Voluntarios de de la ciudad y también Protección Civil, ha sido incansable, y se han rastrillado varios barrios de la ciudad, con la ayuda de perros adiestrados, y continúa hoy en toda la región sin resultados pese a que se ofreció una recompensa y se colocaron urnas para brindar información anónima.

En diálogo con Conclusión, el jefe de los Bomberos Voluntarios de Ceres, a cargo del operativo, Roberto Sánchez reveló que «luego de ocho días de búsqueda, todos los rastrillajes que se han hecho aquí en la ciudad, han dado negativo, y ayer hemos concluido que lo que ocurrió no ha sido una desaparición común y que hay otra cosa». 

Sanchez explicó que «hasta el día de ayer, estuvieron aquí todas las brigadas caninas, incluso una de los Bomberos Zapadores de Rosario, y hemos hecho una intensa búsqueda. La zona se rastrilló en forma completa cuatro veces, con todos los parámetros que indican las normas internacionales, siempre con resultados negativos. Entonces, a partir de ahora, se retiraron parte de las fuerzas que estuvieron aquí participando de los rastrillajes, y ahora las tareas de búsqueda quedan a disposición de la fiscalía, que es la que tiene a cargo la investigación».

Interrogado sobre las probables hipótesis, el jefe de los Bomberos de Ceres, señaló: «Se venía trabajando con dos o tres hipótesis. La primera, con la que se trabajó hasta ahora, que era que el chico se había perdido, está descartada. Por lo tanto lo que sigue ahora es la investigación judicial, y la fiscal Silvina Verney nos pidió que quedemos a disposición de ella para colaborar con lo que vaya surgiendo».

Sanchez remarcó que esto «no quiere decir que la búsqueda se haya terminado», sino que se seguirá buscando, pero en lugares específicos, con datos que provea la fiscalía y que resulten de la investigación.

Probablemente, y según diversas versiones que corren en la zona, la mirada se volverá al entorno familiar del pequeño, para profundizar al investigación y tratar de dar con el paradero del niño.

Maximiliano se encontraba, al momento de su desaparición, al cuidado de su padrastro, ya que su madre estaba internada debido a que acababa de parir. En el momento de su desaparición, Maximiliano estaba con una tía de 14 años, quien declaró, en su momento, que en un descuido, el niño se le escapó.

Ante la falta de noticias, las autoridades ofrecieron días atrás una recompensa de 50.000 pesos a quien aporte datos de su paradero y en las últimas horas se resolvió colocar urnas en la Municipalidad de Ceres, la oficina del Correo Argentino y el hospital local para posibilitar el acercamiento de datos en forma anónima.